El característico rojo de Ferrari ha inundado el museo Mobility City de la capital aragonesa con motivo de la exposición ‘Pasión y leyenda’, que ha conseguido reunir a 14 joyas automovilísticas de varias colecciones privadas en una muestra «única e irrepetible» a nivel nacional, que rara vez se puede ver fuera del museo italiano de Maranello.
Así lo ha descrito el director de Mobility City, Jaime Armengol durante la presentación de la muestra, quien ha destacado la singularidad de la colección, que podrá visitarse hasta el próximo 31 de agosto.
«Somos muy hiperbólicos cuando hablamos de ciertas cosas, pero hoy sí podemos decir que estamos ante una exposición singular«, ha afirmado Armengol, quien ha explicado que «hay más posibilidades de que nos toque el Gordo de Navidad este año, que ver un solo modelo de estos coches en nuestro día a día». Y en esta muestra hay catorce.
Y no exagera, ya que esta se trata de una ocasión única, donde los visitantes podrán ver, y en cierto modo oír, piezas tan míticas como el ‘Ferrari F40’, el reconocible ‘Ferrari Enzo’ o los codiciados modelos de la serie ‘Big Five’.
Organizada por la Fundación Ibercaja, la muestra también contará con el acompañamiento del sonido de los motores de cada modelo, que rugirán en la sala para que los interesados puedan sumergirse mejor en mundo de la marca italiana.
Por su parte, el director general de la fundación, José Luis Rodrigo, ha agradecido a los coleccionistas que han hecho posible este proyecto. «Nos vais a hacer muy felices a todos los aragoneses», ha señalado el director, que ha añadido que esta colección «es muy difícil que se repita no solo en Aragón, sino en toda España».
«La historia de Ferrari es tan larga y apasionante que es casi imposible resumirla», ha señalado el miembro del comité asesor de Mobility City José Manuel Bernad, quien ha añadido que Zaragoza ha conseguido condensar décadas de innovación automovilística, éxitos en la Fórmula 1 y diseños vanguardistas en una selección que emocionará tanto a los fanáticos de la marca como a quienes nunca han pisado un circuito.
Desde ediciones limitadas como SP1, hasta el LaFerrari Aperta, el deportivo F40 o el F50, pasando por el 288 GTO, el público podrá ver y escuchar de primera mano los motores de la marca italiana en una muestra que pocas veces se ha visto fuera del museo oficial de Maranello.
Una colección donde «todo era cuestión de soñar», según ha afirmado el coordinador de contenidos de la exposición, Ibon Ollero, que tras meses de organización ha podido hacerse realidad.
«Un Ferrari es un sueño, y para la mayoría de la gente seguirá siéndolo», decía Enzo Ferrari, pero esta vez, el sueño se materializa en la capital aragonesa, porque si bien conducirlos seguirá siendo un privilegio para unos pocos, contemplarlos está ahora al alcance de cualquiera.
