Fernando Alonso ya lo avisó el jueves: esperaban sufrir en Monza, un circuito especialmente difícil para un Aston Martin que sigue sin rumbo en su desarrollo. Y la clasificación ha confirmado los peores pronósticos del asturiano. Su compañero Lance Stroll ha caído en Q1 y a él le han faltado 10 milésimas para acceder a Q3: «Es mejor de lo esperado», valoraba cabizbajo tras bajarse de su monoplaza.
«Decimoquinto y decimosexto eran las posiciones que estimábamos, estar un poco más arriba da alguna esperanza de coger puntos», ha dicho Fernando sin demasiado convencimiento. A continuación, ha lanzado una seria advertencia a su equipo: «El coche la verdad es que ha sido decepcionante. Repetimos que tenemos que mejorar, lo sabemos, estamos trabajando en ello, pero sí, el nivel de este fin de semana creo que ha sido un poco por debajo de lo mínimo necesario para nosotros, así que otro toque de atención que tenemos que tomarnos en serio», ha subrayado.
«No puede ser que el undécimo puesto te deje un buen sabor de boca, tenemos que cambiar esta rutina que hemos entrado», ha añadido Alonso, aumentando la presión en el equipo de Silverstone, que no encuentra solución a sus males.
Fernando ha tratado de analizar el mal momento que atraviesa Aston Martin a pesar de la enorme inversión y el esfuerzo realizado en los últimos meses: “Es una mezcla de cosas que salieron mal durante la temporada. Algunos paquetes fueron una mejora y otros, un paso atrás. En algún caso, un paso al lado que no cambió mucho las prestaciones del coche. Seguimos esperando a esa gran mejora que nos dé tres décimas y nos acerque a los equipos top. Sé que el equipo trabaja muy duro para traer piezas nuevas en las próximas carreras y hay un optimismo razonable alrededor de esas piezas. Creo que terminaremos la temporada un poco mejor que ahora. Pero las últimas cuatro o cinco carreras han sido complicadas para nosotros», concede.
De cara a la carrera, con los puntos en su horizonte, Fernando destaca que la clave puede estar en la gestión de neumáticos, debido a las altas temperaturas que se esperan el domingo en Monza: «Vamos a cocer los neumáticos con estas temperaturas», ha ironizado. «Puede ser que veamos un Monza diferente. Todos los equipos hemos guardado dos juegos de neumáticos duros para la carrera, así que no será una ventaja. La estrategia a una parada será la favorita, como siempre en Monza, pero si llega el ‘graining’ extremo todos los equipos pueden ir a dos. Los neumáticos dictarán la estrategia”, avisa.
