La violencia sexual incluye cualquier acto de naturaleza sexual no consentido, mientras que la ciberviolencia sexual se refiere a actos similares realizados a través de internet o dispositivos digitales. Es importante entender los diferentes tipos de violencia sexual y ciberviolencia sexual para poder prevenirlos y combatirlos. De todo ello versará la mesa de Mesa de análisis que acoge el Club el viernes, 4 de julio, en la que participarán Sandra Losada Menéndez, socióloga, profesora de Secundaria einvestigadora de Doctorado; Agustín Zaragozá Granell, investigador y docente, especializado en estudios de género y masculinidades, y María del Rosario González Arias, investigadora en literatura, feminismos y representaciones del cuerpo.
Nuevas formas de violencia cultivadas en el ciberespacio
Los especialistas señalan que desde un concepto amplio de las formas de violencia sobre la mujer hay que tener en cuenta nuevas formas de violencia de género que surgen como consecuencia de la aparición y desarrollo de las nuevas tecnologías. Todas estas conductas de violencia de género que se ejercen a través de las nuevas tecnologías, de las redes sociales o de Internet se engloban bajo la denominación de «violencia de género digital». Esta nueva forma de ejercer violencia de género particularmente está afectando a colectivos vulnerables como el de la adolescencia. Así se refleja en las cifras del estudio realizado por la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género en el que se muestra un aumento de las conductas de violencia de género digital en adolescentes.
Estrategias de dominación
Entre estas conductas, el ciberacoso supone una forma de limitación de la libertad que genera dominación y relaciones desiguales entre hombres y mujeres que tienen o han tenido una relación afectiva; supone una dominación sobre la víctima mediante estrategias humillantes que afectan a la privacidad e intimidad, además del daño que supone a su imagen pública. Se produce generalmente sin que haya coincidencia física, la reiteración se convierte en la estrategia de invasión de la intimidad más utilizada por los acosadores. Por ejemplo, la insistencia en el envío de mensajes o las peticiones recurrentes para conseguir algo se convierte en la fórmula para acosar a la víctima. O tras la ruptura de la pareja, los ciberacosadores utilizan Internet para alcanzar a la víctima, siendo la estrategia comunicativa utilizada el chantaje emocional, para lograr volver a mantener una relación directa con la víctima.
