Solo hay un nombre que ha eclipsado a Messi en el inicio del Mundial de Clubes en Miami. Y, por supuesto, es argentino. El traspaso de Franco Mastantuono por el Real Madrid por 63,2 millones de euros, cifra anunciada públicamente por River, se ha convertido en el mayor de la historia del fútbol argentino. El valor del importe es tal, que ha conseguido colarse en el ‘top 10’ de transferencias históricas de un jugador de Argentina, lo que da buena fe de la apuesta que supone para el club blanco.
Baile final de Mastantuono con River en el Mundial de Clubes
De esos algo más de 63 millones, está previsto que River Plate se gaste la mitad en tres refuerzos: lateral izquierdo, pivote, mediocampista ofensivo y un delantero. De este modo se espera que el equipo de Marcelo Gallardo pueda hacer un buen desempeño en la Libertadores. Uno de los puntos de la negociación por Mastantuono fue, precisamente, el hecho de que Franco pudiese terminar el año con el equipo Millonario para contribuir, con su desarrollo explosivo, en la lucha por el título continental.
Sin embargo, Mastantuono, que cumple la mayoría de edad después del Mundial de Clubes, que sí jugará con River, pasará a formar parte del Real Madrid. Pasará a formar parte del Real Madrid para la temporada 2025/2026, después de que el propio Xabi Alonso apostase personalmente por su fichaje, llegando a comunicarse con él para confirmar un fichaje que ya se había decantado. A pesar del amor proclamado del jugador por River, su único deseo siempre ha sido fichar por el club madridista, a pesar de la irrupción del PSG.
Franco, por tanto, vivirá su despedida de River en EEUU, con un Mundial de Clubes donde los equipos argentinos esperan hacer un buen papel. En el entorno de Boca, el fichaje de Mastantuono ha provocado sensaciones contrapuestas. De un lado, supone quitarle uno de los hombres más poderosos a su gran rival. Ya lo vivió en carne propia en el último Superclásico, con un tanto de falta por toda la escuadra que dejó enmudecido al Xeneize. Por otro, está el aporte económico que esta operación puede brindar al Millonario.
Riquelme, en el foco del descontento Xeneize
Los focos apuntan directamente a Juan Román Riquelme, presidente de Boca, al que algunos hinchas recordaban la cantidad del traspaso obtenido por River: «¡Mucha plata!». No corren buenos tiempos para el Xeneize, que ha perdido la regularidad en los torneos continentales. Esta temporada ha sido un largo camino en el desierto sin haber podido participar en ningún torneo continental. Se quedó sin Libertadores tras ser eliminado en la fase 2 del torneo, cuando cayó ante el Alianza Lima peruano. Tampoco pudo jugar la Sudamericana.
Para contrarrestar el estado de desazón que envuelve al ganador de seis Copas Libertadores, Riquelme lanzó a su llegada de Miami un mensaje de esperanza para la hinchada de Boca, muy crítica con su desempeño, pese a ser un ídolo histórico de la institución. “Ahora tengo ilusión, más claro no puedo ser. Sabemos todos que nos daría mucha felicidad contar con él y la ilusión que uno tiene es que a la vuelta del Mundial de Clubes ver si puede volver a la Bombonera”. La cita alude a Leandro Paredes, pivote argentino de la Roma, que, precisamente, se encuentra en Miami de vacaciones.
Vieiri apuesta por Boca
Hay una bala extra para los equipos que participan en el Mundial de Clubes, debido a una ventana que la FIFA abrirá desde el 27 de junio al 3 de julio de cara a los octavos de final de un certamen que Boca quiera aprovechar para volver a ponerse en el escenario internacional. En el recuerdo de sus aficionados todavía están días como el de la Copa Intercontinental que el equipo dirigido por Carlos Bianchi le ganó al Milan en 2003. Por el momento, ya cuentan con un gran aliado para sus expectativas, Christian Vieri, embajador de Dazn, que ayer incluyó a Boca entre sus favoritos, junto al PSG.
¿Por qué? «Me gusta Boca Juniors», fue la respuesta directa del italiano, recibida con gozo por un aficionado Xeneize necesitado de alimentar los buenos recuerdos con hechos del presente. Para recuperar la ilusión, Riquelme ha traído a un viejo conocido como Miguel Ángel Russo, que debutará ante el Benfica después de un aterrizaje en Miami complicado, con una negativa de visado, finalmente aceptado, de Ayrton Costa. Pero, sobre todo, con el espíritu de redención que domina a todos los aficionados de un club histórico que teme quedarse aún más atrás de River en el presente incierto.
