Manu y Rosa son expertos remontadas, victorias y roscos de infarto en Pasapalabra. Sin embargo, como todo esperto, el madrileño y la gallega también tienen sus trucos para enfrentarse cada tarde a las preguntas del rosco.
Sin embargo, estos trucos parece que han quedado al decubierto gracias a uno de lso invitados de la semana, Raquel Sánchez Silva, que ha revelado que se ha fijado en Manu y en Rosa. “Sois imperturbables”, ha asegurado. Se ha referido, en concreto, al momento de El Rosco y cree que ha descubierto sus gestos para mantener la concentración. Los ha comparado con el ritual de Rafa Nadal en sus partidos de tenis.
Raquel ha desvelado algunos de los trucos de Manu, como el gesto que delata cuándo va a contesta o las posturas y la mirada de Rosa.
Origen y evolución del concurso
Pasapalabra nació en el Reino Unido con el nombre de The Alphabet Game y fue adaptado para la audiencia española por Telecinco. A lo largo de su trayectoria, ha pasado por distintas cadenas, incluyendo Antena 3, donde se emite actualmente. Con más de veinte años de historia, el programa ha sabido renovarse para mantener la atención de la audiencia, gracias a su formato ágil y retador.
El juego gira en torno a la adivinanza de palabras basándose en definiciones, siguiendo un orden alfabético. Este planteamiento no solo resulta entretenido, sino también educativo, ya que fomenta el conocimiento y el uso correcto del idioma español.
El impacto cultural en España
El efecto de Pasapalabra en la televisión española es innegable. Ha inspirado la creación de otros formatos similares y ha generado un gran interés en la audiencia. Además, ha incorporado al vocabulario cotidiano expresiones como “pasapalabra”, término que usan los concursantes para evitar responder a una pregunta, y que ahora forma parte del habla diaria en España.
El programa ha conseguido reunir a familias frente al televisor, creando un espacio donde el aprendizaje y el entretenimiento se combinan de manera armoniosa. Su éxito radica en un formato atractivo y en la capacidad del programa para conectar emocionalmente con su público.
El formato y su atractivo
Pasapalabra presenta un esquema sencillo pero efectivo. Los concursantes superan distintas pruebas para acumular tiempo, que luego emplean en el desafío final conocido como el “rosco”. En esta prueba, deben completar un círculo de palabras que comienzan con cada letra del alfabeto, manteniendo la tensión y el interés del espectador hasta el último instante.
La esencia del programa radica en poner a prueba tanto la habilidad como el conocimiento y, a la vez, ofrecer una experiencia enriquecedora para los espectadores. Esta combinación ha sido clave para su perdurabilidad y éxito.