Con Flick hice el clic

Seguro de sí mismo, como un veterano en la selección absoluta, Marc Casadó (Sant Pere de Vilamajor, 21 años) fue de los primeros que bajó a la zona de prensa tras el entrenamiento del miércoles por la mañana para cumplir con el ‘media day’ organizado por la RFEF antes de los partidos contra Dinamarca y Suiza de Nations League. “Qué increible mediocentro” o “caray, qué bien habla”, coincidían en los colegas de la prensa madrileña, con aquella envidia sana (o no) de ver cómo el FC Barcelona no para de sacar talento -también para alimentar a la Roja- y el Madrid, en cambio, no aporta a ningún futbolista al equipo nacional. Y Marc, como también hace siempre Álvaro Morata, se los ganó saludándolos a todos educadamente al pasar, antes de atender a Mundo Deportivo. Tiene madera de capitán, siempre lo ha sido. Es maduro y muy consciente de lo que le ha costado llegar hasta aquí. Y ha venido para quedarse.

Hace unos cuatro meses estaba llorando en Córdoba tras caer en el ‘playoff’ de ascenso con el Barça Atlètic y ahora está con la selección absoluta.

Han sido unos buenos meses. La verdad es que estoy muy contento. Tanto la familia, amigos y conocidos, como yo. Ahora, hay que aprovechar esta oportunidad.

«Han sido buenos meses y estoy muy contento. Ahora quiero aprovechar la oportunidad en la selección»

Últimamente, los jóvenes del Barcelona llegan al primer equipo y enseguida están en la selección. Esto dice mucho de ustedes, pero también de la preparación con la que llegan.

Desde la cantera del Barça se está haciendo una faena muy buena, creo que se está formando a jugadores de la manera correcta. Después se ve que al llegar al primer equipo, la gente está respondiendo muy bien.

Parece que ahora se llega muy rápido, pero todo tiene su proceso. Usted lo vivió con Xavi, donde estuvo más de 40 partidos convocado pero casi ni jugó.

Parece que ya con 17 o 18 años tienes que estar debutando, pero mi proceso ha sido más lento, quemando etapas poco a poco y también me ha servido para estar más preparado al debutar.

Es un buen ejemplo de paciencia en tiempos de inmediatez. Todo tiene que ser ya, rápido. Del cadete piden subir al Juvenil A. Marc Casadó cumplió con cada paso: Juvenil B, Juvenil A, Barça Atlètic, primer equipo sin jugar… Paciencia y resiliencia.

Todas estas etapas me han ayudado ahora a estar más preparado. Y yo siempre he querido estar en el Barça. El club ha decidido que las etapas para mí eran mejor así y la evolución ha ido bien para ahora poder dar un buen nivel.

Quizás le pongo en el primer aprieto, pero ahora todos quieren colgarse la medalla de Marc Casadó. Xavi porque le hizo debutar; Deco porque apostó al renovarle y ofrecerle primer equipo con el rol de Sergio Roberto y Flick por el rendimiento que le está sacando. ¿Quién es esa figura clave para que hoy esté donde está?

En el proceso hay mucha gente que te ayuda a ir sumando cositas para ahora estar listo y he intentado sacar las cosas positivas de todo el mundo. Creo que la gente de mi alrededor me ha ayudado muchísimo también para poder ahora lograr lo que lo que se está logrando.

¿A quién se refiere?

La familia, los entrenadores, tutores de La Masia, amigos, el representante, por ejemplo. Mucha gente que ha estado a mi lado apoyándome en los momentos complicados. Y en los buenos, ayudándome a que no me relajara y a seguir mejorando.

¿Pensó alguna vez en irse del Barça?

Por yo querer, no. Sí que es verdad que hubo momentos en los que dije: ‘Si no estoy jugando aquí, hay que buscar otra opción’, pero yo siempre he querido jugar en el Barça, vestir esta camiseta y ojalá hacer historia en este club.

«Hubo momentos que dije: ‘Si no juego, hay que buscar otra opción’, pero siempre quise hacer historia en el Barça”

¿En qué momento hizo el ‘clic’ de decir: “ahora sí puedo triunfar en el Barça”?

En esta pretemporada con Flick hice ese ‘clic’. Yo renové porque me dijeron que Flick me quería en la plantilla, me quería ver, pero sí que es verdad que la idea anterior también era renovar porque yo siempre he querido estar vinculado al Barça. La idea era salir cedido, pero hablaron con Flick y dijeron que me quería ver en pretemporada y que en teoría contaba conmigo.

¿Y cómo afrontó la pretemporada?

Con ilusión de demostrarle al míster que yo podía estar en la plantilla del primer equipo y así ha sido.

«La idea era salir cedido, pero hablaron con Flick y dijeron que me quería ver en pretemporada, que contaba conmigo»

Me da la sensación de que una de sus virtudes es su fortaleza mental.

Aquí la gente de mi alrededor me ha ayudado muchísimo porque yo soy una persona muy ambiciosa y eso a veces te pasa una mala jugada. Te pones de mala hostia, nervioso cuando ves que no estás teniendo la oportunidad. Mi gente me ayuda mucho a intentar calmarme, a buscar profesionales para trabajar esto y creo que me ha ido muy bien.

¿Trabaja con psicólogo deportivo? ¿En qué le ha ayudado?

Sí. Me ayudó sobre todo al principio, cuando veía que no tenía las oportunidades que quería y yo creía que estaba trabajando al máximo. Eso me frustraba bastante. En mi cabeza decía que si no estaba teniendo la oportunidad era porque realmente no lo estaba dando todo. Y me frustraba saber que sí lo estaba dando todo, pero a la vez pensar que podía dar más para intentar jugar algo. Al trabajar con gente profesional en ello, me ayudó a estar más tranquilo porque a veces no todo depende de ti. Puedes estar dando el máximo y el entrenador no confía en ti, no te pone. Entonces es cuando tú tienes que estar tranquilo con tu trabajo y seguir haciendo lo mismo.

«El psicólogo me ayudó cuando veía que no tenía oportunidades y yo creía que estaba trabajando al máximo»

Esa etapa de frustración, ¿era el año pasado cuando iba convocado con el primer equipo, pero no jugaba?

Exacto, al principio de temporada, ahí tuve un momento complicado que me frustré bastante, pero la gente de mi alrededor me ayudó a buscar soluciones que me ayudaron.

Pero en cambio, Márquez sí confiaba muchísimo en usted.

Sí. Después bajaba con el filial y la confianza de Márquez era tremenda. Lo importante era trasladar el nivel que estaba mostrando en el filial, al primer equipo.

«La temporada pasada tuve un momento difícil en el que me frustré, pero mi gente me ayudó a buscar soluciones»

Tiene madera de líder y se sabe ganar a los entrenadores. Es como el delegado de clase, como el alumno aplicado. Se ve también con Flick. Hablan mucho en el campo. ¿Cómo se lo ha ganado?

Sí, con los entrenadores me gusta mucho hablar de táctica, de todo, porque siempre he dicho que lo más importante es que en el campo el equipo esté cómodo. Y hay momentos que los equipos rivales también juegan. Te hacen cosas que tú no te esperas y hay que ajustarlo tanto con el entrenador como con el resto de jugadores.

Este verano se habló de fichajes, incluso cuado se lesionó Bernal se intentó firmar a Bajcetic, que ahora está con la Sub-21. Personalmente, ¿cómo lo vivió?

Hoy en día en el mundo del fútbol siempre se habla de muchas cosas y creo que lo importante es estar tranquilo con el trabajo que estás haciendo, dar siempre todo de ti porque así las cosas irán mejor. A partir de ahí, llegarán los resultados.

Se lesionó Marc Bernal, luego no se fichó a Bajcetic ni a ningún recambio y se apostó por Casadó en el partido contra el Valladolid. ¿Ese examen fue un punto de inflexión?

La lesión de Marc fue dura para todos. Se está recuperando ahora y quiero mandarle todos los ánimos para él. No es fácil tener una lesión así, pero estamos seguros que volverá y más fuerte. Ese partido ante el Valladolid fue justo después de la lesión y sabía que yo ahí tenía una oportunidad y tenía que aprovecharla si quería tener protagonismo en el Barça. Sabía que sería un partido importante para mí. Intenté dar mi máximo nivel y por suerte salió un buen partido.

¿La prueba definitiva fue contra el Bayern de Kimmich y compañía en Champions?

La verdad es que estaba más tranquilo en ese partido porque no pensaba tanto en mi rendimiento, sino en que el equipo tenía que ganar, ya que era una victoria importante para seguir arriba en la clasificación de Champions. También por el rival que era, porque en los últimos partidos contra el Bayern, al Barça no le estaban saliendo demasiado bien las cosas y tanto yo como todo el equipo teníamos ganas de cambiar esa dinámica.

¿Qué supuso enfrentarse a Kimmich? ¿Es más el cachondeo de dentro del vestuario o realmente es un referente?

Fue la broma que hicieron en el vestuario con la comparación, pero no lo tomé como nada más allá. Lo único en lo que pensaba era en ganar.

Antes hablábamos de la lesión de Bernal. Permítame la pregunta puñetera. ¿Ha pensado alguna vez cómo hubiera sido su progresión si él no se hubiera lesionado?

Siempre hay cosas que lo cambian todo. Tanto para bien, como para mal. Al final tienes que fijarte en el día a día y en saber aprovechar oportunidades que a veces no son lo más agradables, como por ejemplo la lesión de Marc, que nos dejó a todos muy tocados.

«Tuve que saber aprovechar oportunidades que no son agradables, como la lesión de Bernal»

Vino después el Madrid, un 0-4, importante para el vestuario a nivel de confianza. ¿Fue la prueba definitiva de que este equipo puede ganar a cualquiera?

Nosotros estamos tranquilos con lo que hacemos, sabemos que hay que seguir mejorando para poder ganar partidos y títulos. Eso fue una gran demostración de que contra equipos grandes también podíamos dar el nivel y creo que ahí todo el mundo lo vio.

¿Fue su mejor victoria?

Puede ser, sí. Ir al Bernabéu y ganar 0-4 para un canterano de Barça siempre es especial.

«En el 0-4 al Madrid demostramos que contra grandes equipos damos el nivel; fue mi victoria más especial»

Nos ponemos en modo selección. Llega avalado por los elogios de un jugador de la categoría de Sergio Busquets, que habló muy bien de usted.

Los pude escuchar, sí, y me pusieron muy contento. Que un jugador como Busi, de talla mundial, hable así de ti, es increíble.

Con Rodri lesionado, está aquí Zubimendi y parece que De La Fuente ha abierto un cásting para el mediocentro. ¿Qué le ha pedido el seleccionador?

Hablé con él ayer y también me puso un vídeo cortito para decirme más o menos lo que buscaba de mí. Ahora me tocará convencer a De la Fuente e intentaré hacerlo lo máximo posible para que así sea.

«El seleccionador me puso un vídeo para mostrar lo que buscaba de mí; todos me han acogido muy bien”

Y en estos primeros entrenamientos, ¿cómo se está sintiendo aquí en la absoluta? ¿Le ha sorprendido alguna cosa?

No, pregunté porque venía nuevo aquí al vestuario y siempre tienes la curiosidad de cómo será la gente. Me hablaron muy bien, me dijeron que hay muy buen rollo y así ha sido. Me han acogido todos muy bien y eso creo que es importante para estar cómodo con todos.

Su camino en la selección tampoco es habitual. Entró en la sub-16, desapareció hasta el último parón con la Sub-21 y ya está con la absoluta.

Ahora ha sido el ‘boom’ y ha ido todo más rápido, pero lo importante es estar tranquilo con lo que haga, hacerlo lo mejor posible y así creo que las cosas saldrán mejor.