Freddie Pritchard, un niño de 9 años, falleció trágicamente el 14 de septiembre mientras regresaba de unas vacaciones en Tenerife con su familia. Descrito como «feliz, educado y cortés», Freddie era un gran seguidor del Wrexham AFC, del Liverpool FC y de varios clubes internacionales y europeos. Además, desde los seis años jugaba al fútbol con el Gresford Athletic, según ha informado el medio británico Chronicle Live.
Para apoyar los gastos del funeral de Freddie, se ha lanzado una iniciativa de recaudación de fondos, con donaciones que también se destinarán al Servicio de Ambulancias de Cheshire, al Hospital Countess of Chester, y a la suite Alder Hey Snowdrop. En menos de dos semanas, ya se han recaudado más de 5.000 libras -unos 6.000 euros al cambio-, según informó el diario Express.
La tía de Freddie, Jessica Tomlinson, lo recordó con cariño. «Era el mayor personaje, siempre estaba riendo y tenía una sonrisa traviesa que encantaba a todos. Nada será igual sin él. Freddie era el niño más amable y tenía muchísimos amigos», comentó a unas declaraciones recogidas por el citado medio.
Homenajes en su escuela y equipo de fútbol
La familia planea homenajear a Freddie con un «banco de amigos» en su escuela y plantando un árbol en su honor. Jessica agregó que «todo fue muy inesperado, no estaba enfermo ni nada parecido. Freddie aprendió a nadar en sus vacaciones y estaba muy orgulloso de sí mismo. También enseñó a su mamá a nadar».
En All Saints School, se planea instalar un banco en honor a Freddie, ya que siempre quiso que todos fueran amables y que nadie estuviera solo. También se plantará un árbol en el área de Forest School para recordar su espíritu aventurero y amor por la naturaleza.
Richard Hatwood, director de la escuela, describió a Freddie como «un alumno feliz, educado y siempre sonriente, amigo de todos». La comunidad escolar celebró un servicio especial para rendir homenaje al pequeño.
Minuto de silencio en homenaje a Freddie
El Gresford Athletic Football Club también emitió un comunicado lamentando la pérdida de Freddie, quien era parte de su equipo desde los seis años. Su entrenador destacó la pasión y dedicación que Freddie mostraba en cada partido, recordándolo como un joven con un potente pie izquierdo que marcó muchos goles.