En las últimas semanas, se han intensificado los rumores en torno a un posible cambio de proveedor de motores para Alpine, actualmente impulsado por unidades de potencia Renault. Bajo la nueva dirección de Flavio Briatore, la escudería francesa planea despedirse de sus propias unidades de potencia y cerrar un acuerdo con Mercedes a partir de la temporada 2026, aunque incluso podría ser antes.
Briatore, que confirmó su acuerdo con Alpine durante el GP de España como asesor ejectuvo del equipo, no sólo tiene la intención de comprar el motor a Mercedes, sino también la caja de cambios y la suspensión trasera. Una solución que de confirmarse, le ahorraría mucho dinero a la formación gala.
El límite presupuestario es una preocupación constante en la F1 moderna. Los equipos deben controlar meticulosamente sus gastos si desean mantener un buen desarrollo del monoplaza a lo largo del año. Además, debido a los altos costos de desarrollo, muchas escuderías optan por comprar las piezas más caras en lugar de investigarlas y fabricarlas internamente.
Este será el caso de Alpine a partir de 2026 con la nueva reglamentación. La escudería francesa ha evaluado los elevados costos asociados con el desarrollo de una nueva unidad de potencia y ha decidido ajustar su enfoque, optando por adquirir componentes clave de Mercedes para maximizar los beneficios de tener una unidad de potencia de garantías y controlar el presupuesto.
Según informa L’Équipe, las negociaciones entre Alpine y Mercedes están muy avanzadaa. Durante el Gran Premio de Hungría 2024, Briatore fue visto negociando en el motorhome de Mercedes y aunque todavía no se ha selledo el contrato, parece que la líneas generales del acuerdo ya están definidas.
Varias informaciones de las que se hace eco DAZN indican que a los empleados de la fábrica de motores Renault en Viry-Châtillon se les comunicó el martes 23 de julio que no desarrollarán la unidad de potencia para Alpine F1 en 2026.
Desarrollar un motor propio puede costar alrededor de 100 millones de euros anuales, mientras que ser un equipo cliente de Mercedes tendría un coste de 17 millones de euros para la escudería gala. Esto permitiría a Alpine reducir su gasto en aproximadamente 83 millones de euros por temporada, además de beneficiarse de las garantías de rendimiento y fiabilidad que ofrece Mercedes. Este enfoque es similar al que han adoptado McLaren, Aston Martin y Williams, clientes de Mercedes.
La estrategia de adoptar motores Mercedes podría transformar a Alpine en un contendiente más fuerte en la parrilla de la Fórmula 1 y de paso, ayudar a convencer a Carlos Sainz para fichar por el equipo, ahora que Briatore ha tomado las riendas.
