El Juzgado de Instrucción número 2 de Amposta (Tarragona), competente en materia de violencia sobre la mujer, ha ordenado la prisión provisional por un delito de homicidio del vecino de esta localidad, de 47 años, que presuntamente mató y descuartizó a su pareja en la vivienda de ella. El pasado lunes agentes de la Policía Local de Amposta arrestaron al sospechoso tras el aviso de un amigo suyo, a quien había confesado el crimen.
Los agentes acudieron a casa de la víctima en la calle Xile de Amposta y encontraron sus algunos restos repartidos en bolsas. El resto estaban en contenedores de basura y algunos otros todavía no se han encontrado, por lo que los Mossos d’Esquadra los siguen buscando.
La víctima llevaría varios días muerta, según fuentes de la investigación. Este jueves, el sospechoso ha pasado a disposición judicial y únicamente respondió a preguntas de su abogado. Después el juzgado ha ordenado su ingreso en prisión provisional mientras se instruye el procedimiento.
Denuncias cruzadas
El juzgado también ha recibido el atestado policial que ha corroborado que se trataba de una pareja con numerosos enfrentamientos entre ellos, tal y como dijeron los vecinos. Desde noviembre de 2023 existía una causa abierta contra el detenido por una denuncia de ella por malos tratos y por eso tenía en vigor una orden de alejamiento, que se saltó en dos ocasiones, en enero y febrero de 2024.
Por esta denuncia se realizó un juicio en el Juzgado Penal 1 de Tortosa el 21 de febrero de 2024, pero la víctima no compareció, por lo que se absolvió a su pareja por falta de pruebas. Además, al declararlo inocente, se retiró la orden de alejamiento. Un mes después, el sospechoso presuntamente mataría a su pareja.
En el atestado policial también consta que en enero pasado la pareja tuvo un enfrentamiento en la vivienda, pese a que él tenía una orden de alejamiento en vigor, por la que ella causó lesiones por arma blanca al acusado. La mujer pasó a disposición judicial y quedó en libertad pero investigada por un delito de lesiones. Además, tenía en vigor una orden de alejamiento de ella respecto de él.
El 6 de febrero de 2024, semanas antes del juicio en Tortosa que acabó con absolución, los dos volvieron a discutirse en la vivienda familiar pese a que cada uno de ellos tenían en vigor una orden de alejamiento. Por eso se celebró un juicio rápido donde los dos van como acusados por un delito de quebrantamiento de medida cautelar.
Este juicio acaba con una sentencia de conformidad para ambos donde se los condena a una pena de 4 meses de prisión, pena que se suspende, de acuerdo con todas las partes, por un plazo de 2 años, siempre y cuando no delincan en ese tiempo. Sin embargo, el sospechoso supuestamente mató a su pareja durante la Semana Santa en un nuevo caso de violencia machista.
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