El PP se plantea sumar a su candidatura para las elecciones europeas al ex secretario general de Ciudadanos, Adrián Vázquez. El interés del partido de Alberto Núñez Feijóo también se extiende a la eurodiputada naranja Eva Poptcheva. Son los dos nombres que formaban parte del acuerdo que ambos partidos negociaban antes de Semana Santa, cuando todavía había opciones de integrar el partido naranja para la cita electoral catalana del mes de mayo y, después, la europea de junio. En realidad, las conversaciones con Vázquez llevaban produciéndose meses, igual que la colaboración de los dos grupos parlamentarios en la ofensiva desplegada contra la ley de amnistía y el Gobierno de Pedro Sánchez en terreno comunitario.
El adelanto electoral en Cataluña precipitó la negociación y, como publicó El Periódico de España, del mismo grupo editorial, el calendario obligaba a hacer un pack para las dos elecciones. El PP, además, que pretende sumar todos los esfuerzos del centro derecha, exigía que Ciudadanos no se presentara por su cuenta a ninguna de las dos, como ya ocurrió en las generales de julio. Y fue el núcleo de resistencia del partido naranja en Cataluña el que frustró ese pacto por rechazar de plano una integración dentro del PP. La imposibilidad de que Adrián Vázquez diera garantías de que su formación acataría lo acordado provocó una enorme desconfianza entre los conservadores. No podían asumir ese riesgo.
Precisamente, no poder sacar adelante el acuerdo con el PP hizo también que Vázquez dimitiera. Ahora ya no forma parte de Ciudadanos y agota la legislatura actual con su acta en Bruselas y como presidente de la Comisión de Asuntos Jurídicos en el Parlamento Europeo. Pero fuentes de la dirección nacional confirman que “la puerta para que se sume está completamente abierta”. Y en el entorno de Feijóo también reconocen que es “un activo” con el que querrían contar en la candidatura.
El PP todavía tiene pendiente la elaboración de las listas y en Génova aseguran que no están cerradas y que aún tardarán días, precisamente por el arranque de la campaña vasca, que retrasará el resto de decisiones. “Paso a paso y por orden”, dicen en la cúpula conservadora, aunque también reconocen que el esquema general sí está bastante claro. Y en esos planes, si finalmente las conversaciones llegan a buen puerto, está la de integrar a Vázquez y probablemente también a Poptcheva.
Lo único claro es que ya sí tendrían que ir bajo las siglas del PP. Eso es irremediable teniendo en cuenta que el pacto a nivel de partidos quedó frustrado. Podrían ir como independientes, eso sí. En la negociación global Vázquez había logrado además que ambos pasaran a la familia liberal, que siempre fue un objetivo esencial para Ciudadanos. Pero las circunstancias actuales cambian esas condiciones.
Hace solo unos días Vázquez reapareció en escena en la cadena Cope y volvió a defender la idea de una lista constitucionalista que pudiera plantar cara a Sánchez en Bruselas. El exlíder de Ciudadanos, como también ocurre con altos dirigentes del PP, está convencido de que la batalla europea contra la ley de amnistía será absolutamente clave. Y su labor al frente de la Comisión de Asuntos Jurídicos, igual que su agenda de contactos o relación directa con el comisario de Justicia hasta ahora, el liberal Didier Reynders, le ha permitido jugar un rol importante en iniciativas significativas contra Carles Puigdemont.
En esa entrevista radiofónica el eurodiputado aseguró que la ley de amnistía “es una mentira absoluta”, “un trampantojo” porque “no se podrá aplicar a los que quieren que se les aplique, los mismos que la han redactado, al menos en el próximo año y medio”. Recordaba que la respuesta de la Comisión Europea a una pregunta suya al respecto fue clara: los jueces españoles a los que se les exigirá aplicar la norma preguntarán a la justicia europea si la amnistía cumple con la legislación europea. Es decir, las cuestiones prejudiciales, explicó Vázquez, implicarán sí o sí una paralización.
La posición del eurodiputado en lo que respecta a esta ley está completamente alineada con la del PP. Y en el partido de Feijóo no esconden que se trata de un perfil que encaja en la candidatura que los conservadores quieren presentar este mes de junio, con personas que tengan una trayectoria en Bruselas, una red de contactos y que hayan participado en la respuesta al Gobierno y en el freno a los independentistas desde el terreno comunitario. Indudablemente, como en el resto de elecciones, el PP tiene todavía más interés en sumar a excargos de Ciudadanos y exhibir una reunificación de ese espacio político.
Las conversaciones deben reiniciarse y el resto de citas electorales marcará los tiempos. De hecho, no hay previsión de tener noticias sobre la lista europea antes de que pasen las elecciones vascas del 21 de abril. Pero después, prácticamente a la par que la campaña catalana, todo se precipitará.
En los últimos meses Vázquez, que ya tenía una clara sintonía con Esteban González Pons (hombre de la total confianza de Feijóo y su principal asesor en los asuntos internacionales e intitucionales) y ha estado trabajando con Dolors Montserrat en el Parlamento, ha sumado una interlocución directa con la secretaria general, Cuca Gamarra, con la que realmente ha pilotado las conversaciones para el acuerdo de partidos. Un pacto que no salió adelante, pero que sí ha dejado una relación de confianza.
