Como de momento no existe una solución inmediata para resolver el colapsoque sufren estos juzgados, salvo que el Ministerio de Justicia esté dispuesto a invertir en crear nuevos órganos judiciales y dotarlos de medios suficientes, se están aplicando paños calientes para hacer frente a esta situación. Así, en el informe del Defensor del Pueblo una de las medidas que se plantean es limitar el tiempo de la tramitación de la demanda.
La mayoría de casos que llegan a estos juzgados, en los que se recurren decisiones adaptados por la administración, suelen ser repetitivos. Se plantean demandas de forma individual, pero en muchos casos el fondo del tema es el mismo. Por ello, en el informe se plantea la posibilidad de reducir el periodo de prueba. Se propone que las primeras demandas se tramiten de forma habitual, pero que el resto, dado que casi siempre la prueba es la misma, se dicte sentencia sin la necesidad de prolongar la tramitación.
Esta situación no es nueva, ya que existen medidas legislativas para aplicar este ahorro en la tramitación. Así, en el informe del Defensor del Pueblo se recuerda que estas medidas se han aplicado ante las demandas de ayuda en respuesta a las consecuencias económicas o sociales de la guerra de Ucrania, o por el apoyo que se prestó para la reconstrucción de la isla de la Palma. Estas medidas de urgencia, además, están respaldadas por las normas europeas.
Aunque el refuerzo de apoyo, con la incorporación de un segundo juez a cada uno de los juzgados administrativos, caducaba a final del pasado año, se ha decidido prolongar esta medida. Ni siquiera con dos juez, repartiéndose entre ellos todas las demandas que se presentan en el juzgado, se está solucionando el problema. Gabilondo ya advierte que en estos momentos sería impensable prescindir de estos apoyos, ya que estos jueces están resolviendo en estos momentos casi el triple de los casos que se les exige por el Ministerio de Justicia. Trabajan tres veces más que otros jueces, pero el sueldo es el mismo. Además, se trata de una jurisdicción muy especializada y es complicado encontrar jueces especialistas en esta materia administrativa.
Lo que sugiere el informe es que no solo es necesario que se inaugure de inmediato el cuarto juzgado, sino que se cree una quinta oficina judicial, ya que de lo contrario la situación de caos se prolongará en el tiempo, en perjuicio sobre todo de los ciudadanos.
Otro de los temas que preocupan y que se ha convertido en un auténtico problema es la falta de personal interino para incorporarse a las oficinas judiciales. La lista de personal interino está vacía desde hace mucho tiempo, por lo que es casi imposible encontrar funcionarios para incorporarse a los juzgados.
