Además de hacer caso omiso a las señales de tráfico, el despiste generalizado se ha producido porque de Caputxins a Comptat del Rosselló, y hasta Anselm Clavé y Alexandre Jaume, el carril bici es de doble dirección, pero la calle es de un único sentido, en dirección a la plaza de España. Y con el corte de la vía para bicicletas que también utilizan masivamente patinetes, muchos de estos vehículos se han puesto a circular por el centro de la calzada en dirección contraria, provocando frenazos de automóviles y situaciones peligrosas con conductores sorprendidos por la nueva situación.
La confusión del tráfico se ha complicado todavía un poco más en la salida del aparcamiento del subterráneo de Comtat del Rosselló, que cruza con el carril bici cortado, con un paso de peatones, con los coches que vienen por la derecha y ahora también con las bicicletas y patinetes que hacen caso omiso de las señales y utilizan la calzada en dirección contraria, pese a los nuevos carteles colocados por el Ayuntamiento de Palma que informan de las nuevas restricciones.
Las obras que se realizan en la calle Bisbe Perelló, cuya finalización se ha prolongado hasta el 13 de octubre, han empezado a invadir también la plaza Comtat del Rosselló con una nueva excavación para renovar las redes de saneamiento. Y en la plaza de España, con las obras ocupando ya casi toda la superficie del espacio público, bicis, patinetes y peatones comparten los pasos habilitados en el perímetro y también en el centro de la plaza.