El Gobierno alemán, Siemens Gamesa y un consorcio de bancos han alcanzado un acuerdo para rescatar a Siemens Energy con 15.000 millones de euros al que el Ejecutivo de España se ha abierto a sumarse con una línea de avales bancarios. El grupo arrastra múltiples problemas en su división de fabricación de aerogeneradores. La compañía emplea a 5.000 trabajadores de forma directa en España, especialmente en País Vasco y Navarra. En concreto, el Gobierno alemán concederá una garantía de 7.500 millones de euros a la compañía, que forma parte de esas líneas por un total de 15.000 millones de euros acordadas con bancos privados y otras partes interesadas.
El Ejecutivo germano asume la anterior solución a cambio de que los demás actores se compromentan a aportar fondos, según ha informado en un comunicado el Ministerio de Economía. Horas después de este anuncio, el Ministerio de Industria de España ha señalado que está trabajando en «una posible línea de avales bancarios para nuevos contratos en el exterior» de la empresa. Esta línea contaría con la cobertura de la Compañía Española de Seguros de Crédito a la Exportación (Cesce).
«Esta es una empresa clave y debe jugar un papel importante en la soberanía energética por lo que, antes de tomar medidas drásticas, debemos sentarnos y analizar todas las posibilidades que nos ofrecerá la regulación de renovables de la UE», ha señalado el Ministerio de Industria.
En las últimas semanas, el Gobierno alemán ha mantenido intensos contactos con Siemens Energy y Siemens, el principal accionista de esa compañía, y bancos privados. El requisito previo del Gobierno era que todas las partes interesadas participaran adecuadamente en la protección de la empresa. Este anuncio de rescate se produce horas antes de que la empresa confirme pérdidas millonarias, que serán la antelasa de un severo plan de ajuste que será comunicado el próximo lunes.
Así, el acuerdo para asegurar las líneas de garantía necesarias por un importe total de 15.000 millones de euros prevé ahora que los bancos privados conceden a Siemens Energy una línea de garantía por un importe total de 12.000 millones de euros. Siemens Energy obtendrá otros 3.000 millones de euros en negociaciones con otras partes interesadas, según recoge la agencia Europa Press.
De los 12.000 millones de euros que los bancos privados prestan a Siemens Energy, el Gobierno alemán proporciona una garantía proporcional de 7.500 millones de euros para una línea de garantía de 11.000 millones de euros; mientras que un consorcio bancario asume como parte de su propio compromiso una parte de 3.500 millones de euros de la línea de garantía.
Además, los bancos privados también se hacen cargo de una línea de garantía de 1.000 millones de euros sin garantía del Gobierno federal, que está garantizada por un tramo de primera pérdida de Siemens AG. El primer tramo de pérdidas tiene prioridad en caso de daños. Asimismo, Siemens Energy y Siemens tienen la intención de negociar la venta de acciones en una empresa conjunta con una entrada de efectivo para Siemens Energy de aproximadamente 2.000 millones de euros.
Prohibición, dividendos y bonus
Igualmente, se aplica la habitual prohibición de dividendos y, para el consejo de administración, de bonus. Este acuerdo está sujeto a la finalización exitosa de los procesos de revisión necesarios por parte del Gobierno federal, la participación del Bundestag alemán y la aprobación de los órganos y organismos pertinentes de Siemens Energy y Siemens.
Siemens Energy, que este miércoles presenta los resultados de su ejercicio fiscal, anunció el pasado mes de agosto unas pérdidas netas atribuidas de 3.632 millones de euros en los nueve primeros meses de su año fiscal (entre octubre y junio), lo que suponía quintuplicar los ‘números rojos’ de 711 millones de euros que se anotó en el mismo periodo del año anterior, derivado de los problemas de puesta en marcha en Siemens Gamesa.
La empresa se ha visto lastrada por el incremento sustancial de fallos en las piezas de turbinas eólicas fabricadas por Gamesa, reconociendo unos costes previstos con cargos por gastos futuros que ascienden a 2.200 millones de euros, incluyendo 1.600 millones de euros relacionados con los problemas de calidad de algunas plataformas terrestres, al tiempo que la mayor parte de los costes de reparación estimados se espera para los ejercicios 2024 y 2025. Además, el grupo participado por Siemens ya empeoró la cifra de pérdidas netas que espera para este año, hasta situarlas cerca de los 4.500 millones de euros.