Después de la temporada histórica del PSG, con la consecución del triplete y la ansiada Champions, el equipo de Luis Enrique busca repetir la hazaña y mantener el nivel y las expectativas. Líderes en la Ligue 1, aunque sin gran margen, y con un pleno de victorias en Champions, el martes las cosas empezaron a torcerse.
El PSG no solo dejó escapar los tres puntos frente el Bayern en el ‘Parc des Princes’, sino que también perdió a dos titulares clave: Hakimi, tras una entrada durísima de Luis Díaz que acabó con expulsión, y el reciente ganador del Balón de Oro, Ousmane Dembélé, que solo puedo estar 25 minutos en el campo, apenas una semana después de volver de sus molestias en el muslo. A estas bajas se suman las de Doué, que ya lleva varios partidos fuera, y la más reciente de Nuno Mendes después del último choque de Champions.
Con todas estas lesiones acumuladas, el PSG ha decidido moverse en el mercado de invierno para fichar hasta tres piezas nuevas: un centrocampista con experiencia en la élite, un extremo polivalente capaz de jugar en ambas bandas y también en punta, y un defensa que pueda actuar de central y de lateral derecho. Para este último puesto, la dirección deportiva se ha fijado en Eric Garcia, que termina contrato el año y creen que encajaría a la perfección.
En verano, Luis Enrique confiaba en su plantilla estelar y sólo la reforzó con las incorporaciones de Chevalier y Zabarnyi. El asturiano apostó por los jóvenes para darle profundidad al equipo, proporcionando minutos a promesas como Mayulu, Mbaye o Ndjantou. Sin embargo, las ausencias prolongadas de los pesos pesados empiezan a preocupar a los parisinos, que tienen el listón altísimo tras el éxito de la pasada temporada.
La creciente lista de lesionados, sumado al desgaste físico por el ritmo y exigencia del calendario, abre la puerta a nuevas incorporaciones en enero que puedan reforzar y encajar en las necesidades de Luis Enrique.













