La trabajadora del Espanyol que ha denunciado al futbolista del club Álvaro Aguado por violarla en los baños de una discoteca de Barcelona, en junio de 2024, contó al día siguiente a dos de sus amigas que el jugador la había agredido sexualmente y que se sentía preocupada y traumatizada.
Según fuentes de la agencia Efe, así lo han relatado este miércoles las dos testigos ante la jueza de Barcelona que investiga la denuncia por agresión sexual que una trabajadora del club presentó contra Aguado, al que acusa de haberla violado durante una fiesta informal que el club celebró el 23 de junio de 2024 en la discoteca Opium de Barcelona
Las testigos no asistieron a la fiesta en la que ocurrieron los hechos, pero sí han explicado que la trabajadora del club se puso en contacto con ellas 24 horas más tarde y les relató que había sido agredida sexualmente por Aguado. La joven formalizó su denuncia ante los Mossos d’Esquadra seis meses después, el pasado mes de enero.
En su declaración ante la titular del Juzgado de Instrucción número 13 de Barcelona, las amigas de la denunciante han añadido que no conocen detalles de lo sucedido en los baños de la discoteca porque no quisieron incomodarla con preguntas sobre la agresión, puesto que su preocupación era el estado psicológico de la denunciante.
Más testigos
Ante la instructora han desfilado este miércoles otros cinco testigos, entre ellos dos chicas, propuestas por la defensa de Aguado, que coincidieron en la discoteca Opium con la denunciante y el jugador, a quienes no conocían personalmente de antemano.
Estas testigos, cuya versión contradice lo relatado por la víctima, han explicado que se pusieron en contacto con responsables del Espanyol para ofrecerse a declarar en el caso de que fuera necesario, tras saber por la prensa que Aguado había sido denunciado por violación aquella noche.
Según la versión de las amigas, que aseguran que pasaron buena parte de la noche siguiendo los movimientos de la denunciante en la fiesta, la joven estuvo bailando con Aguado de forma «sexualizada». Durante la comparecencia, la jueza les ha recordado su obligación de decir la verdad por su condición de testigos.
Celebración del ascenso
También han testificado tres trabajadores del Espanyol, que, como ya hiciera hace unos días el jugador Eduardo Expósito, han mantenido que no vieron a la denunciante bailar ni conversar con Aguado aquella noche.
En su denuncia, la víctima mantiene que el jugador la violó en un baño de la discoteca en el transcurso de una fiesta que el club había organizado de forma informal para celebrar que el Espanyol había logrado el ascenso a Primera División.
El local no conserva ya las grabaciones de las cámaras de seguridad del recinto, que podrían haber arrojado luz sobre lo sucedido en los momentos previos y posteriores a los hechos denunciados, dado que los vídeos se borraron una vez transcurrido el tiempo prudencial de seguridad.
