Agentes de la Guardia Civil han desmantelado una red criminal de carácter familiar dedicada al tráfico de drogas en las localidades de Melide y Arzúa. La investigación, llevada a cabo por el Equipo ROCA de Santiago de Compostela en colaboración con el Puesto de la Guardia Civil de Melide, pone fin a una actividad delictiva que había generado una considerable alarma social en la zona.
La operación se inició en enero de este año, tras detectarse un constante trasiego de potenciales consumidores alrededor de un establecimiento hostelero en Melide, que actuaba como epicentro de la trama. Este local era utilizado como un punto de venta encubierto, desde el cual se abastecía de cocaína y otras sustancias a consumidores de las comarcas de Terras de Melide, Arzúa, Ulloa y Deza.
Como resultado de la exhaustiva investigación, se llevaron a cabo seis registros domiciliarios en distintas fases operativas, en inmuebles y locales directamente vinculados a los investigados. Durante estas intervenciones, los agentes intervinieron más de 180 gramos de cocaína, 1,5 kg de cogollos de marihuana y 4 bolsitas de hachís con un peso aproximado de 40 gramos.
Del mismo modo, confiscaron más de 37.000 euros en efectivo, parte de los cuales se encontraba oculto en dobles fondos y envases camuflados, destacando un hallazgo de 30.000 euros sellados y envasados al vacío ocultos en la tapa de una persiana, una báscula de precisión, dos vehículos y cinco teléfonos móviles, junto con otros dispositivos electrónicos. Paralelamente, tsmbién se localizó una plantación indoor de marihuana en uno de los registros de una de las viviendas.
Toda esta operación ha culminado con la detención de cinco personas: Un varón de 30 años y su pareja de 27 años, ambos vecinos de Arzúa. Una mujer de 55 años y otra de 23 años, vecinas de Melide, y un varón de 50 años, vecino de Vilanova de Arousa, identificado como el presunto proveedor de la sustancia estupefaciente.
Las pesquisas confirmaron que el grupo utilizaba el establecimiento hostelero en Melide como tapadera para la venta directa de cocaína, manteniendo una operativa constante basada en repartos encubiertos, entregas rápidas y contacto directo con los consumidores. La estructura criminal se encontraba jerarquizada, con funciones claramente repartidas, y generaba beneficios económicos no justificables legalmente. Este hecho, junto con la utilización de dinero en metálico oculto, ha motivado la atribución de un delito de blanqueo de capitales.
A los arrestados, que ya han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción nº 1 de Arzúa, decretando el ingreso en prisión para uno de ellos y libertad con cargos para los cuatro restantes, se les imputan los delitos de tráfico de drogas, pertenencia a grupo criminal, blanqueo de capitales y resistencia y desobediencia a agentes de la autoridad.
Esta operación ha tenido un notable impacto social en la zona, no solo por la implicación de un local de acceso público, sino también por el amplio alcance comarcal de la red de distribución desarticulada. La Guardia Civil reitera su compromiso con la seguridad ciudadana y la lucha contra el tráfico de drogas.