Telefónica ha puesto en marcha una revisión total de su estrategia para adaptarse a la era de cambios que se avecina en el sector de las telecomunicaciones (con la previsión de una ola de fusiones entre compañías europeas) y para contribuir a impulsar la deseada autonomía estratégica en sectores clave de la Unión Europa. Una autonomía estratégica necesaria tanto en el ámbito de la tecnología como en el de la defensa, y en ambos campos Telefónica quiere tener un papel relevante.
El presidente de Telefónica, Marc Murtra, ya ha confirmado su intención de que la compañía invierta en defensa y seguridad en los próximos años y quiere ser un actor protagonista. “Nos gustaría jugar un papel fuerte en los próximos 10 años para servir en el ámbito de la defensa”, ha subrayado Murtra durante su intervención en el II Foro del Mediterráneo, que se celebra los días 16, 17 y 18 de junio en Málaga organizado por Prensa Ibérica e impulsado por Fundación “La Caixa”.
Murtra ha defendido el papel que desarrollarán los grupos de telecomunicaciones en el ámbito de la seguridad y de la defensa, en coordinación obligatoriamente con las políticas industriales fijadas por el Gobierno y en colaboración con los grupos del sector propiamente de la defensa. Colaboración en tecnologías y en ciberseguridad, pero el presidente de Telefónica ha enfriado la posibilidad de que esa coordinación derive en movimientos de integración entre telecos y empresas de defensa.
“No veo una convergencia futura de empresas del ámbito de la seguridad y de las telecomunicaciones”. El Gobierno ha desginado a Indra como el grupo tractor para impulsar la industria defensa nacional y en los últimos meses se ha especulado con una posible integración entre Telefónica y la propia Indra (de la que Murtra era presidente hasta su elección para ponerse a los mandos de la teleco, el pasado enero). “Me cuesta ver una convergencia”, ha resumido de manera general.
Nuevo núcleo accionarial
Telefónica ha vivido una transformación profunda de su accionariado, con la entrada de nuevos grandes socios. La irrupción de Arabia Saudí a través de Saudi Telecom fue respondida por el Gobierno con la vuelta del Estado español al accionariado de la operadora un cuarto de siglo después de su privatización y con un aumento de la participación de Criteria, el brazo inversor de la Fundación “la Caixa”. Los tres grandes accionistas tienen participaciones en torno a un 10% cada uno. “Es bueno tener un nuevo núcleo duro que apuesta por el medio y largo plazo”, ha subrayado Murtra. “Tenemos una configuración accionarial muy buena y muy útil”.
En concreto, sobre el desembarco de Arabia Saudí como gran socio de la compañía, el presidente de Telefónica ha apuntado que “la participación de STC como accionista que cree en el largo plazo, con conocimiento profundo industrial y con vocación de apoyo es bueno” para la compañía. “Otras consideraciones geopolíticas corresponden a las autoridades competentes y nosotros nos subrogamos a lo que digan”.
Crear titanes europeos
Telefónica pretende tener un papel activo y relevante en los cambios que se vienen el sector de las telecos y de la tecnología en Europa, y también en el proceso de concentración de empresas para crear grandes grupos en la UE con capacidad para invertir en tecnología y competir con los gigantes de Estados Unidos y China.
“Si Europa quiere autonomía estratégica debe tener grandes titanes tecnológicos. Vamos a teneder a la creación de granes titanes tecnológicos, y creemos que va a ocurrir en las telecomunicaciones”, ha anticipado Murtra, vinculando la necesidad de revisión estratégica emprendida por el grupo con estos cambios que vienen. “Creemos que va a haber consolidación, y Telefónica quiere aprovechar esa oportunidad. Ayudaremos desde España”.