‘¡De viernes!’ tenía preparado un programa con cuatro invitados de plena actualidad. El primero en aparecer fue Carlo Costanzia, quien regresaba a un plató pocos días después de hacerse pública la dura condena que afecta a sus hijos, Pietro y Rocco, sentenciados a más de 12 y 8 años de prisión respectivamente por intento de homicidio.
Carlo Costanzia, en ‘¡De viernes!’
Si bien el tema principal de la entrevista al consuegro de Terelu Campos era especialmente delicado, otro momento duro momento se vivía con Marta Peñate y Tony Spina. La pareja acudió a ‘¡De viernes!’ para compartir el duro golpe que ha supuesto perder el bebé que estaban esperando.
La nota más distendida de la noche la ponía Carmen Alcayde, que acudía al programa de Santi Acosta y Bea Archidona para hacer un repaso a su paso por ‘Supervivientes 2025’. Pocos días después de regresar a España, la presentadora hacía balance de su concurso, destacando su conflicto con Pelayo Díaz y su comentada amistad con Montoya y Anita.
Carmen Alcayde, en ‘¡De viernes!’
Sin embargo, el público del plató parecía bastante decidido a apoyar a Pelayo y a cuestionar a la invitada. De hecho, tras una pausa publicitaria, José Antonio León intervino y aseguró: «El público no está apoyando a Pelayo, no apoyan tu causa, creen que desde el principio te has apoyado a Anita y Montoya porque tenías una táctica y sobre todo porque piensan que eres una…» Tras este paso al público que el colaborador había pactado previamente, gritaron juntos «migajera«, haciendo referencia a que recogía las migajas que Anita y Montoya le dejaban.
José Antonio León, en ‘¡De viernes!’
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Un ‘happening’ que el colaborador pensaba que quedaría gracioso, pero no fue así. Lo hacía justo en un momento en el que la invitada estaba llorando por su amistad con Montoya y no esbozó ni una pequeña sonrisa. Ante tal situación, Terelu Campos no dudó en saltar y reprochar la actitud de su compañero: «Oye, José Antonio, me vas a perdonar como compañera, pero alentar a que el público le diga ‘migajera’ a otra compañera no me parece bonito. Carmen no se lo ha tomado de broma».
