New york knicks, 119 – boston celtics, 81
Los New York Knicks se clasificaron para su primera final de la Conferencia Este en 25 años tras aplastar a los Boston Celtics por 119-81 y destronar a los vigentes campeones de la NBA por 4-2.
Los Knicks (terceros del Este) se enfrentarán, con factor cancha, por un puesto en las Finales de la NBA a los Indiana Pacers (cuartos). El primer partido se jugará el miércoles en el Madison Square Garden con mucho aroma de revancha porque los de Tyrese Haliburton eliminaron a los neoyorquinos el año pasado en la segunda ronda.
Desde el año 2000 ha tenido que esperar esta legendaria franquicia para alcanzar una final de conferencia. En esa ocasión cayeron precisamente ante los Pacers de Reggie Miller. En 1999 llegaron asimismo a la final del Este y también se midieron a Indiana, pero esa vez sí avanzaron a unas Finales en las que perderían frente a los San Antonio Spurs de Tim Duncan y David Robinson.
Varias décadas más hay que remontarse para encontrar los dos únicos títulos de los Knicks, correspondientes a 1970 y 1973.
Por todo ello, la afición neoyorquina ha vivido con absoluta pasión estas últimas semanas con unos Knicks que les han vuelto a ilusionar y con un Garden ha sido una olla a presión, especialmente este viernes para disfrutar de una jornada ya histórica para el equipo de la Gran Manzana.
Aficionados de los Knicks celebran el pase a la final del Este en los aledaños del Madison
Jalen Brunson, el referente de este conjunto, fue el principal recurso ofensivo con 23 puntos (8 de 14 en tiros con 3 de 8 en triples), 6 rebotes y 6 asistencias en tanto que OG Anunoby volvió a ser decisivo en ataque y defensa (23 puntos y 9 rebotes).
Además, Josh Hart firmó un triple-doble (10 puntos, 11 rebotes y 11 asistencias), Karl-Anthony Towns brilló con 21 puntos y 12 rebotes y Mikal Bridges aportó 22 tantos en una velada mágica de los Knicks, que batieron con +38 el récord de su mayor triunfo en un partido de ‘playoff’.
Los Celtics, heridos de muerte por la grave lesión de Jayson Tatum, necesitaban una noche épica pero se quedaron lejísimos dado que ya perdían de 27 puntos al descanso. Jaylen Brown lo intentó todo pero el acierto no estuvo de su lado. Acabó con 20 puntos, 6 rebotes y 6 asistencias pero 7 pérdidas de balón. Además fue eliminado por faltas en el tercer cuarto. Ni Derrick White (8 puntos con 3 de 11), ni Jrue Holiday (4 puntos con 1 de 8) ni Kristaps Porzingis (4 puntos con 1 de 4) estuvieron a la altura del reto.