22 narcotraficantes han reconocido hoy, en el juicio celebrado en la Audiencia Provincial de Palma, que formaban parte de una red que introducía y distribuía grandes partidas de cocaína en Mallorca. Estos sospechosos han confesado tras alcanzar un acuerdo con la Fiscalía y aceptar penas que oscilan entre los tres y los cinco años de prisión. Otros siete encausados han negado su implicación en los hechos y el ministerio público reclama para ellos penas de hasta 11 años de cárcel por delitos contra la salud pública y grupo criminal.
El macrojuicio es fruto de una investigación llevada a cabo por la Policía Nacional entre 2022 y 2023, bautizada como ‘Operación Amazonas’, que permitió incautar seis kilos de cocaína, tres de marihuana y 400 gramos de éxtasis. La Fiscalía sostiene que los 30 encausados -hay uno huido de la Justicia- formaban parte de dos organizaciones diferentes dedicas a traer a la isla importantes alijos de estas drogas.
Uno de los grupos estaba liderado por un ciudadano belga que utilizaba correos humanos para traer a España alijos de cocaína procedentes de Paraguay. Los investigadores documentaron el viaje de una mujer, que llegó a Barcelona con un paquete de droga y viajó después en barco a Mallorca. Este grupo contaba con una quincena de miembros para llevar a cabo labores de logística y distribuir los estupefacientes en la isla a través de puntos de venta en diferentes localidades.
El cabecilla de la otra banda era un hombre de nacionalidad española, residente en la isla y con antecedentes penales por narcotráfico. Él y sus lugartenientes viajaban con frecuencia a Madrid para comprar grandes cantidades de cocaína, que transportaban después hasta Mallorca. La operación policial se desarrolló a lo largo de varias fases durante el año 2023 y permitió a los investigadores decomisar drogas valoradas en más de 1,2 millones de euros.