La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha recibido este viernes la medalla de esclava de honor de la Archicofradía Primera de la Real e Ilustre Esclavitud de Nuestro Padre Jesús de Medinaceli, en la Basílica de Jesús de Medinaceli de los Padres Capuchinos, ubicada en la Plaza de Jesús de la capital.
Díaz Ayuso ha recibido este reconocimiento de manos de Miguel Ángel Izquierdo, hermano mayor de la Archicofradía, y ha acompañado en procesión al Señor de Madrid en su recorrido por el centro de la ciudad. La de Jesús de Medinaceli es una de las cinco basílicas de la capital, famosa por albergar la imagen del Cristo de Medinaceli, talla del siglo XVII muy querida y venerada por el pueblo de Madrid.
Este Viernes Santo Madrid vivió uno de sus días grandes con siete procesiones recorriendo las calles de la capital: Medinaceli, Santo Entierro, Siete Dolores, El Divino Cautivo, Los Alabarderos, Cristo de la Misericordia y Santísima Virgen de la Soledad de Villaverde Alto y Procesión del Silencio de Carabanchel.
A las 19.00 horas recorrieron las calles las imágenes de Nuestro Padre Jesús de Medinaceli (anónimo, s. XVII) y Nuestra Señora de los Dolores en su Soledad (Rafael García Irurozqui, 1948), una procesión organizada por la Archicofradía Primaria de la Real e Ilustre Esclavitud de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Medinaceli
Con salida desde Basílica de Jesús de Medinaceli (Plaza de Jesús, 2), los nazarenos visten túnica de color morado, zapatos y calcetines negros, guantes blancos y cordón amarillo con borlones en las puntas (rodeando el cuello por detrás, anudado delante en la cintura y circundando la misma, anudado nuevamente delante, dejándolo caer hasta el bajo de la túnica), y escapulario descubierto.
Recorrió la calle Duque de Medinaceli, Plaza de las Cortes, Carrera de San Jerónimo, Puerta del Sol, Calle Alcalá, donde realizarán la estación de penitencia próxima a la Iglesia de las Calatravas, Calle Sevilla, Plaza de Canalejas, Carrera de San Jerónimo, Calle Duque de Medinaceli, Plaza de Jesús y regresó a la Basílica de Jesús de Medinaceli.
También marchó la Real Congregación del Santísimo Cristo de la Fe, Cristo de los Alabarderos y María Inmaculada Reina de los Ángeles, que sacó en procesión su talla del Santísimo Cristo de los Alabarderos (Felipe Torres Villarejo, 2007).
La imagen realiza su estación de penitencia sobre un trono elaborado en el año 2002 en los talleres de Arte Martínez (Horche, Guadalajara) de más de una tonelada de peso y es portado por 44 anderos que soportan 50 kilogramos cada uno, en una procesión que se prolonga durante más de cuatro horas. Para ello es trasladado el Martes Santo desde la Iglesia Catedral de las Fuerzas Armadas hasta el Palacio Real.
En este caso, la túnica es de color azul granito de la Guardia Real, con tirilla en el cuello de color rojo granito, cíngulo rojo con borlas y escudo de la congregación en el pecho. Se lleva capirote rojo granito con el escudo en el centro bordado, zapato y calcetín negro y guantes blancos.