En plena alerta internacional por la emergencia sanitaria del mpox (antes viruela del mono), con epicentro en África, especialmente en República Democrática del Congo (RDC), un estudio financiado por Médicos Sin Fronteras (MSF) y publicado en ‘Lancet Infectious Disease’, revela que diez días después de la vacunación, el riesgo de desarrollar otra enfermedad terrible, el ébola, se reduce en un 84% en las personas vacunadas en comparación con las no inmunizadas.
Con datos recogidos durante la mayor epidemia registrada en este país, entre 2018 y 2020, en la cual se registraron 3.470 casos y 2.287 muertes, el estudio ha sido realizado por Epicentre, el centro de investigación médica y epidemiología de Médicos Sin Fronteras (MSF), en colaboración con el Institut National de Recherche Biomédicale (INRB) y el Ministerio de Salud Pública de la RDC.
Vacuna autorizada
La investigación, según los detalles que aporta MSF, se centra en la vacuna ‘rVSVΔG-ZEBOV-GP,’ la única contra el ébola cuyo uso recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS) para las personas con alto riesgo de contraer la enfermedad durante una epidemia. Fue precualificada por la OMS en noviembre de 2019 y autorizada por la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) en diciembre del mismo año, para su uso en personas expuestas a partir de un año de edad.
Es el primer estudio publicado que evalúa la eficacia de la vacuna ‘rVSVΔG-ZEBOV-GP’ fuera de un ensayo clínico
«Disipa las incertidumbres sobre la eficacia real de la vacuna: es el primer estudio publicado que evalúa la eficacia de la vacuna ‘rVSVΔG-ZEBOV-GP’ fuera de un ensayo clínico y se llevó a cabo durante la segunda mayor epidemia de ébola de la que se tiene constancia», explica Sophie Meakin, epidemióloga de Epicentre.
Una dosis única
Diseñada para administrarse como dosis única, la vacuna se utilizó como parte de una estrategia en anillo: inmunizar a los contactos de las personas en las que se ha confirmado la infección por el ébola, los contactos de estos contactos y el personal sanitario. Durante la epidemia de ébola en RDC, que tuvo lugar de 2018 a 2020, la vacunación comenzó en agosto de 2018 y fueron vacunadas a más de 300.000 personas.
Basándose en un estudio con resultados negativos en las pruebas, el trabajo demuestra que la vacunación con ‘rVSV-ZEBOV’ ofreció una alta protección contra el desarrollo de la enfermedad por el virus del Ébola a partir del décimo día de recibir la dosis. La eficacia se estimó comparando las tasas de positividad a la prueba PCR del virus entre personas vacunadas y no vacunadas. Todas ellas habían declarado haber estado en contacto con una persona infectada y se habían sometido a pruebas en centros sanitarios para confirmar si eran o no portadoras de la enfermedad.
Variación por sexo
En el análisis participaron 618 personas: 309 que dieron positivo en la PCR y 309 personas con síntomas sospechosos de ébola pero negativo en la PCR. La vacunación redujo el riesgo de desarrollar la enfermedad en un 84% al cabo de 10 días. Se observaron ligeras variaciones en función del sexo: la vacuna fue eficaz en un 80% en las mujeres y en un 86% en los hombres.
Steve Ahuka, jefe de virología del Institut National de Recherche Biomédicale y profesor de medicina de la Universidad de Kinshasa, destaca la importancia de la recopilación sistemática y rigurosa de datos durante las epidemias, a pesar de las dificultades: «Se trata de oportunidades únicas para profundizar en el conocimiento de enfermedades a menudo raras. Se consigue así mejorar la gestión de futuras epidemias, desarrollar nuevas herramientas de control y determinar las mejores estrategias para utilizarlas eficazmente», ha señalado.
En febrero, otro estudio Epicentre demostró que la vacunación reducía a la mitad la mortalidad entre las personas infectadas. Investigaciones que, concluye la organización humanitaria, certifican la importancia de vacunar rápidamente a las personas potencialmente expuestas al virus del Ébola, desde el principio de una epidemia.
