La Liga era algo así como un gigante dormido en el mercado. En los últimos años, ni siquiera los grandes habían mostrado un poderío a la altura de lo que hace no tanto fueron. Movimientos sueltos, sí, pero no suficientes para revertir una tendencia que, a finales del verano de 2023 dejó al campeonato doméstico como el que menos dinero gastó en fichajes de los cinco grandes. Algo que, un año después, parece que no volverá a repetirse.

Fuente