El doblete de Dani Olmo y el recital de Raphinha devuelve la sonrisa a un Barça que es el nuevo líder tras ganar al Alavés

Jugó con fuego el Barça y no se terminó quemando por la pegada que tiene el equipo. No jugaron un gran partido los de Hansi Flick, que sentenciaron el partido en el 93, pero se llevaron lo más importante: la victoria con la que se aúpan al liderato de La Liga a falta de lo que haga el domingo el Real Madrid [Narración y estadísticas del partido].

El día de la celebración del 126 aniversario del club azulgrana no pudo haber empezado peor. Primero, una incidencia con el sistema de entradas provocó largas colas en los accesos al Spotify Camp Nou. 

Un cuarto de hora tardaron las 45.400 butacas del estadio en llenarse. Para ese momento, Pablo Ibáñez ya había marcado el 0-1 y Lamine Yamal había marcado el gol de la igualada. Por lo que el ‘infortunio’ del club le salió caro a muchos aficionados.


Dani Olmo celebra el gol de la sentencia ante el Alavés.

Reuters

La revolución de Flick en el once con Casadó y Marc Bernal tuvo consecuencias en un saque de esquina mal defendido donde los dos jugadores salieron en la foto.

Víctor Parada prolongó en el segundo palo ante Bernal, encontrando a un Pablo Ibáñez que solamente tuvo que empujarla para firmar el 0-1; mientras tanto, Casadó rompía el fuera de juego en una posición incomprensible.

Sin embargo, si algo tiene este Barça es la capacidad para remontar los partidos. El arsenal ofensivo se lució en el Camp Nou con un estelar Raphinha, el show de Lamine y la eficacia de Dani Olmo.

Ante el Alavés, el conjunto azulgrana se encontró un rival incómodo que ejerció una fuerte presión cuando el balón llegaba a tres cuartos de campo y la consigna de Coudet era clara cuando se recuperaba el esférico: el contraataque.

Así pudieron llegar dos goles más, pero Rebbach -con un disparo cruzado que se marchó desviado- y sobre todo Joan García, quien desbarató la mejor ocasión del equipo babazorro en el partido tras el gol.

Y es que el portero del Barça resultó clave en la primera parte con un paradón espectacular al remate a bocajarro de Calebe. Un auténtico milagro que tuvo como consecuencia el gol de la remontada culé.

Del posible 1-2 del Alavés, al 2-1 del Barcelona. Raphinha se lució con su segunda asistencia dándole un gran pase atrás para Dani Olmo, que remató de primeras de forma exquisita, batiendo por bajo a Sivera.

La exhibición de Raphinha

Desde el 25 de septiembre sin ser titular y después de haber jugado 9 minutos ante el Athletic y 28 ante el Chelsea como consecuencia de haber superado una lesión en el tercio medio del bíceps femoral del muslo derecho, Raphinha tenía ganas de demostrar en su vuelta al once inicial.

El brasileño apenas necesitó diez minutos para dejar su sello en el partido: recibió al espacio un pase de Balde y puso un centro medido que no llegaron a rematar ni Lewandowski, ni Dani Olmo, pero sí Lamine en el segundo palo para hacer el 1-1.

Esa sería la primera de las dos asistencias que acabó dando en el partido hasta que en el minuto 60 Hansi Flick decidió que había llegado el momento de darle descanso.

El recital de Raphinha no restó protagonismo al show de Lamine, quien marcó el gol del empate y estuvo a punto de marcar un doblete con un gol de ensueño. Al filo del descanso, se plantó frente a Sivera, pisó el balón y con una filigrana dejó al portero del Alavés vendido.

Sin embargo, su remate con la diestra se fue al palo. La afición se lamentó por la ocasión perdida, pero inmediatamente aplaudió la acción del internacional con España.

Y es que Lamine estuvo muy participativo durante el partido y dejó detalles de su calidad con regates, caños y jugadas que solo tienen su sello. No supo el conjunto babazorro cómo frenar a un jugador que en la segunda parte pudo marcar un golazo desde fuera del área buscando la escuadra.

Una vez que el Barça consiguió el 2-1, el ritmo del partido bajó de forma considerable y se alargó durante toda la segunda parte. Los azulgranas buscaron, aunque sin mucha insistencia, el gol de la sentencia, mientras el plan del Alavés pasó por tener opciones en los últimos minutos.

Jugaron con fuego los de Hansi Flick, pero ni Dani Olmo con un disparo mordido que se marchó rozando el palo y Lewandowski, con un remate a bocajarro que paró Sivera, consiguieron transmitir tranquilidad al aficionado presente en el estadio.

Los de Coudet se lo empezaron a creer y a partir del minuto 80 empezaron a jugar más en campo contrario. Cubarsí evitó el gol del empate de Lucas Boyé con un corte providencial y minutos más tarde Joan García le ganaba la partida a Guridi en un mano a mano, aunque la acción estaba invalidada.

Los de Coudet adelantaron líneas en los últimos minutos, pero el fuera de juego y la defensa azulgrana evitaron males mayores. Y en el último instante llegó el 3-1 de Dani Olmo a pase de Lamine Yamal. El partido, ahora sí, estaba ya visto para sentencia.

Ficha técnica:

Barcelona: Joan García; Eric García (Koundé, min.45), Cubarsí (Christensen, min.84), Martín, Balde; Bernal (Rashford, min.45), Casadó; Lamine Yamal, Olmo, Raphinha (Pedri, min.60); y Lewandowski (Ferran Torres, min.60).

Alavés: Sivera; Otto, Tenaglia, Pacheco, Parada (Toni Martínez, min.80); Blanco; Calebe (Carlos Vicente, min.59), Suárez (Guevara, min.68), Ibáñez (Guridi, min.68), Rebbach (Aleñá, min.58); Lucas Boyé.

Goles: 0-1, m.1: Pablo Ibáñez. 1-1, m.8: Lamine Yamal. 2-1, m.26: Dani Olmo. 3-1, m.93: Dani Olmo.

Árbitro: Miguel Ángel Ortiz (Comité madrileño). Amonestó a Marc Bernal (min.36) por parte del Barcelona y a Abde Rebbach (min.32), Calebe (min.52) y Antonio Blanco (min.81) por parte del Deportivo Alavés.

Incidencias: Partido de la jornada 14 de la Liga EA Sports disputado en el Spotify Camp Nou ante 44.834 espectadores.

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