El delegado del Gobierno en Baleares, Alfonso Rodríguez Badal, ha comparecido este martes en el Senado para explicar las políticas del Ejecutivo central en las islas, con especial atención a la crisis migratoria, que califica de “fenómeno creciente, complejo y profundamente humano”.
El delegado ha cargado contra el Govern de Marga Prohens, el PP y Vox tras las acusaciones de inacción y descoordinación: “Criminalizar la migración, hablar de invasión o de pérdida de control es alimentar el miedo y el odio. Eso es pura xenofobia”, advierte.
Rodríguez Badal ofreció cifras que reflejan la magnitud del problema: 6.083 migrantes han llegado este año a las costas del archipiélago, lo que supone un aumento del 62% respecto a 2024 y un 170% más que en 2023. “Son datos objetivos que demuestran un incremento exponencial de las llegadas”, subrayó.
El delegado del Gobierno asegura que la agencia europea Frontex ya colabora activamente en la vigilancia del mar balear desde febrero de 2025, tras la solicitud formal cursada por España en noviembre de 2024. Rodríguez Badal quiso “desmentir de forma tajante” las afirmaciones de algunos dirigentes del Partido Popular y Vox, que acusan al Ejecutivo de Pedro Sánchez de “no querer pedir ayuda a Europa” o de “negar el refuerzo fronterizo” en el archipiélago.
“Decir que el Gobierno de España no quiere Frontex o que su presencia podría suponer una frontera en el mar es rotundamente falso. Nadie puede poner una valla en el Mediterráneo”, afirmó con contundencia el delegado.
Rodríguez Badal explicó que la función de Frontex no es cerrar el paso a las pateras, sino apoyar a los Estados miembros en las tareas de vigilancia, detección y rescate bajo la supervisión de sus propios agentes. La agencia, dijo, aporta medios aéreos y marítimos que operan en coordinación con la Guardia Civil y Salvamento Marítimo, especialmente en la zona comprendida entre las costas argelinas y el archipiélago balear.
“Estamos hablando de pateras de apenas seis metros de eslora, con 18 o 20 personas a bordo, mucho más difíciles de localizar que los grandes cayucos que llegan a Canarias. Frontex ayuda a detectar y prevenir tragedias en el mar, no a levantar muros”, recalcó.
El delegado insistió en que el objetivo del Gobierno es reforzar la cooperación internacional y salvar vidas, y denunció que algunos discursos políticos busquen “instalar en la ciudadanía una falsa sensación de invasión o descontrol”. “El problema no se resuelve con discursos de miedo. Se resuelve con coordinación, medios y humanidad”, concluyó Rodríguez Badal.
Zona de tránsito
Según explicó, Baleares se ha convertido en una zona de tránsito para migrantes que emprenden largas rutas desde países como Somalia, Sudán u Omán, atravesando el continente africano hasta alcanzar las costas argelinas, desde donde parten en pateras hacia Europa. “La inmensa mayoría continúa su viaje hacia otros destinos europeos, principalmente francófonos”, señaló.
El delegado insistió en que el primer objetivo del Gobierno es salvar vidas, después de que en lo que va de año se hayan recuperado 45 cuerpos en el mar balear. “Es una tragedia humanitaria que nos obliga a actuar con responsabilidad y compasión”, afirmó.
Para hacer frente a la situación, Rodríguez Badal detalló las medidas puestas en marcha por el Ejecutivo, entre ellas el refuerzo de Salvamento Marítimo con una nueva guardamar de 33 metros con base en Ibiza, operativa las 24 horas, y el despliegue de un barco de 70 metros de la Guardia Civil durante los meses de mayor afluencia. También destacó el trabajo “intenso” de la Policía Nacional en la identificación de migrantes y de Cruz Roja, encargada de la primera asistencia y acogida humanitaria.
Asimismo, defendió la creación de tres infraestructuras modulares para mejorar las condiciones de acogida en tránsito: una en el puerto de Formentera, otra en el puerto de Ibiza y una tercera en el puerto de Palma, con una inversión total de 6,7 millones de euros. Estas instalaciones permitirán ofrecer “una atención digna” mientras los migrantes son trasladados a la península o a centros gestionados por Cruz Roja.
Autoridad Portuaria
Rodríguez Badal agradeció la colaboración de la Autoridad Portuaria de Baleares, pero criticó que “algunos partidos, concretamente el Partido Popular”, hayan intentado obstaculizar el desarrollo de estas infraestructuras. “No nos podíamos permitir que personas recién llegadas pasaran la noche al raso en el puerto de Palma. La dignidad humana no puede depender del color político”, afirmó.
Rodríguez Badal explicó además que España solicitó formalmente en noviembre de 2024 la activación de Frontex en el área del mar Balear, y que desde febrero de 2025 esta agencia europea colabora con medios aéreos y marítimos en la detección de pateras. “Decir que el Gobierno no quiere Frontex o que podría cerrar el mar con una frontera es falso. Nadie puede poner una valla en el Mediterráneo”, remarcó.
El delegado del Gobierno completó su intervención destacando el incremento de efectivos policiales en el archipiélago: 79 nuevos agentes de Policía Nacional y 120 guardias civiles más desde principios de año, un refuerzo que atribuyó a la apuesta del Ejecutivo por “una mayor seguridad sin renunciar a la humanidad”.
“Baleares vive una situación complicada, pero estamos respondiendo con más medios, más coordinación y más sensibilidad. Porque detrás de cada cifra hay personas, y nuestra obligación como Estado es protegerlas”, concluyó Rodríguez Badal.