Un año más, la Creu de Santa Ponçaha sido este sábado por la tarde el escenario de la recreación del desembarco de las tropas catalano-aragonesas comandadas por el Rei Jaume I en el año 1229, por lo que este año se celebra el 796 aniversario de la conquista de Mallorca.
Las tropas invasoras y las sarracenas que defendían la isla se han concentrado sobre las 17,30 horas en la Cruz y después se ha llevado a cabo el tradicional desfile de moros y cristianos que ha recorrido la Avinguda Rei Jaume I y la Gran Via Puig de Galatzó. Después de varias escaramuzas entre la que destaca la batalla histórica del caló d’en Pellicer, ambas tropas han protagonizado la gran batalla final en la playa de Santa Ponça en la que, como dicta la historia, se han impuesto las tropas catalanas. En total, han participado en el acto central de las fiestas del Rei en Jaume unas 1.300 personas que formaban parte de ambas collas, ataviadas con coloridos atuendos que potencian la espectacularidad de esta fiesta.
Después el ambiente bélico ha derivado en compañerismo para disfrutar todos juntos de una gran noche de conciertos en la playa de Santa Ponça.
Este domingo, la fiesta seguirá con el mercado medieval en el paseo de la playa de Santa Ponça y una misa solemne, con el ball de l’oferta, a partir de las 19,30 horas. También habrá conciertos y un castillo de fuegos artificiales a las 22,30 horas.