Las acciones de los bancos británicos sufren en bolsa este viernes tras publicarse los rumores de que la ministra de Finanzas de Reino Unido, Rachel Reeves, está considerando imponer un nuevo impuesto bancario en sus intentos de reforzar las finanzas públicas del país.
En concreto, dentro del FTSE 100, los tres bancos con peor desempeño son NatWest, que cae alrededor de un 5%, Lloyds, que se deja un 4% y Barclays que pierde un 3,5%.
Como señala Kathleen Brooks, directora de investigación de XTB, «la caída de las acciones británicas está liderada por los bancos, que lastran el FTSE 100 ante los rumores de una nueva subida de impuestos, esta vez un impuesto extraordinario a las entidades crediticias».
«El goteo de posibles subidas de impuestos que se incluirán en este presupuesto ha dominado la prensa este mes. Hasta ahora, el FTSE 100 se ha mantenido firme. Sin embargo, ahora que parece que Reeves va tras los pesos pesados del FTSE 100, como los bancos, esto podría lastrar el índice de cara al Presupuesto de otoño», dice.
En su opinión, el Gobierno de Reino Unido «parece enfocado en exprimir a las empresas y consumidores con múltiples aumentos de impuestos a finales de este año, lo que está erosionando la confianza y oscureciendo aún más las perspectivas de crecimiento de Reino Unido».
Según recoge una información de ‘Bloomberg’, Reeves podría aumentar los ingresos imponiendo un impuesto extraordinario a las entidades financieras. Un informe del grupo de expertos del Instituto de Investigación de Políticas Públicas (IPPR) calcula que este impuesto podría recaudar 8.000 millones de libras al año.
Además, en ‘Financial Times’ publican que algunos funcionarios laboristas cercanos al Tesoro coinciden en que una decisión de aumentar los impuestos a los bancos en el Presupuesto de otoño ayudaría a tranquilizar al partido. «No implementarán un impuesto a la riqueza, pero podrían hacer algo parecido a un impuesto a la riqueza, como aumentar los impuestos a los bancos«, ha expresado uno de ellos.
Cabe recordar que, en mayo, la número dos del Gobierno, Angela Rayner, propuso aumentar la tasa más alta del impuesto de sociedades para los bancos del 28% al 30%. Mientras, Reeves aseguró el pasado mes de noviembre en declaraciones al Comité Selecto del Tesoro de la Cámara de los Comunes que ya había establecido el límite de gasto y que «no vamos a volver con más aumentos de impuestos».
