Los bomberos de Aragón desplazados a Castilla y León durante los últimos días han sido recibidos «con orgullo» este lunes, cuando han regresado a la comunidad tras unas jornadas de intenso trabajo. El director del Servicio Provincial de Medio Ambiente y Turismo de Huesca, Fran Gómez, y el gerente de Sarga, Jorge Escario, han estado con miembros del dispositivo Infoar durante un acto de recepción en el punto de encuentro de la brigada terrestre R-31 Los Mallos, en Ayerbe.
Ambos han destacado la «profesionalidad, el esfuerzo y el compromiso» demostrado por los efectivos desplazados, tanto los profesionales de la empresa pública Sarga, que forman parte de los retenes de incendios, como del personal funcionario del Departamento de Medio Ambiente, conformado por los Agentes de Protección de la Naturaleza. «Vienen exhaustos de cansancio porque han sido días muy complicados», remarcaba Gómez, y se han tenido que desenvolver en condiciones «tanto orográficas como meteorológicas muy complejas».
«Para nosotros es un orgullo«, ha destacado Escario en referencia a la labor del dispositivo aragonés: «Esperemos que no nos tengan que volver a llamar, pero si nos vuelven a llamar, volveremos a ir; igual que estuvimos en Valencia en la dana e igual que estuvimos en Galicia», ha dicho.
La participación de Aragón en esta emergencia comenzó el 14 de agosto, con el envío de la brigada helitransportada de Ejea de los Caballeros, primer medio aragonés que se incorporó a las labores de extinción. Posteriormente se movilizaron más efectivos hasta conformar el tercer convoy que hoy ha regresado, integrado por personal del Gobierno de Aragón y de la empresa pública Sarga.
Durante cuatro intensas jornadas de trabajo, este tercer convoy ha intervenido en distintos sectores del incendio de Barniedo de la Reina, con actuaciones en zonas como Riaño, Casasuertes y Valverde de la Sierra. Una parte esencial de la intervención ha sido el uso de fuego técnico, especialmente en la primera jornada, cuando se ejecutó una quema de gran envergadura que resultó determinante para cerrar uno de los frentes. A ello se sumaron trabajos de ataque directo, apertura de líneas de defensa y labores de perimetraje.
Las condiciones de trabajo han variado a lo largo de los días, pero en las últimas jornadas han sido especialmente exigentes debido a la inaccesibilidad del terreno, lo que obligó a realizar los avituallamientos en helicóptero y supuso un notable desgaste físico para el personal. Pese a ello, la intervención se ha saldado con éxito y ha contribuido a la estabilización de la emergencia.
Este contingente final ha estado formado por más de 30 profesionales entre las dos brigadas terrestres, una brigada helitransportada -con su helicóptero-, dos autobombas, cuatro Agentes para la Protección de la Naturaleza (3 de ellos dirigiendo las brigadas), técnicos (uno de ellos dentro del Grupo de Apoyo al Director de Extinción -GADEX-) y capataces.
El convoy llega de vuelta a Aragón con el desgaste propio del trabajo realizado, pero motivado y satisfecho por el resultado. En palabras de los responsables de Infoar, “cada jornada se ha podido concluir con éxito, lo que supone una gran satisfacción. Ahora toca volver a casa, que cada profesional regrese a su lugar de origen y estar preparados para las próximas emergencias”.