Marta Peñate está más cerca de cumplir su sueño de convertirse en madre. Tras varios intentos fallidos de abrazar la maternidad junto a su novio Tony Spina, la canaria anunciaba hace unos días que había conseguido quedarse encinta en su tercera transferencia embrionaria, un proceso que ha ayudado a la influencer ha quedars en embarazada y hacer frente a sus problemas de fertilidad.
En esta nueva y feliz etapa, la colaboradora de televisión ya tiene la mente puesta en sus planes de futuro y la boda es uno de ellos. Sin embargo, parece que por el momento, el enlace con Tony Spina no se producirá ya que la influencer tiene claro que quiere que su hijo juegue un papel fundamental en la ceremonia. «Mi sueño es casarme y que mi hija o hijo me lleve los anillos. Entonces no nos casaremos antes del embarazo», ha manifestado.
Vuelta al trabajo
Sin embargo, tras someterse al tratamiento, la influencer está de nuevo en Telecinco, en concreto como colaboradora en Los vecinos de la casa de al lado. «Hoy he vuelto al trabajo para distraerme y porque ya han pasado los tres días críticos, pero me he cogido nervios», ha dicho muy sincera la exconcursante de ‘Supervivientes’ de su estado actual. Marta Peñate está tratando de buscar normalidad, pero es consciente también de su situación y de cómo actuaría si diera marcha atrás o si se hiciera una nueva transferencia embrionaria.
La influencer ha dejado claro y bien patente en público la decisión que ha tomado en caso de tener que volver a repetir esta intervención para quedarse embarazada. «Si me vuelvo a hacer una transferencia no volveré a trabajar hasta pasado mínimo una semana. Este trabajo es un trabajo de emociones», ha manifestado Marta Peñate.