El Girona, sostenido durante casi todo el encuentro por Gazzaniga, cayó en casa en una de las últimas jugadas del partido. Un gol de Etta Eyong en el minuto 89 mantiene al Villarreal en ‘zona Champions’ y deja a los rojiblancos a seis puntos del descenso. El conjunto dirigido hoy por Salva Fúnez, que sustituía este sábado a un Míchel homenajeado por todo Montilivi tras su hospitalización, no supo deshacer el entramado defensivo ‘groguet’ y finalizó el encuentro sin disparar entre los tres palos.
Se citaron en Montilivi dos equipos dispuestos a dominar el partido, a ser protagonistas y a arrebatarle el balón a su rival, una situación que derivó en un inicio de partido muy táctico con pocos acercamientos. Gueye no anduvo fino en un disparo desde la frontal a los ocho minutos. Tampoco tras un pase tenso de Pépé al punto de penalti.
Mientras el Girona seguía desaparecido en el aspecto ofensivo, el Villarreal merodeaba constantemente el área de un Gazzaniga con muy poco trabajo. Hasta que Ayoze dispuso de una triple ocasión que acabó con un gol con la mano y una amarilla para el tinerfeño.
El delantero ‘groguet’ recibió totalmente solo de Baena, pero intentó un disparo extraño con el exterior que detuvo el meta del Girona, que también le paró el rechace a bocajarro. A la tercera fue la vencida, pero para fortuna rojiblanca el tanto no subió al marcador porque, a pesar de que Ayoze se lanzó con todo para marcar, lo hizo con el brazo.
Insistía e insistía el Villarreal, que se iba a marchar sin premio al descanso tras una petición de penalti sobre Baena -por un doble agarrón de Arthur y Yangel- y dos remates más de Foyth y de Pépé. El marfileño, en un gran estado de forma, protagonizó una gran acción individual que no supo culminar con un remate desde el pico del área pequeña que rozó el travesaño.
Trabajo para Gazzaniga
No varió demasiado el guion en la segunda mitad. El Villarreal seguía buscando el 0-1, mientras que el Girona se defendía y apenas llegaba a la portería de Luiz Júnior. El meta del Submarino, sin trabajo hasta el momento, tan solo tuvo que observar como un remate de cabeza muy forzado de Stuani se marchaba desviado. En área contraria, Gazzaniga seguía enchufado, desviando a córner un potente disparo de Álex Baena desde la frontal.
La entrada de Asprilla pasada la hora de juego pareció activar al Girona en ataque, pero tan solo fue un espejismo que duró con un par de fogonazos del colombiano. En cambio, las sustituciones que sí tuvieron el efecto esperado fueron las de Marcelino.
Mazazo final
El técnico ‘groguet’ dio entrada al jugador del filial Etta Eyong y el ex del Cádiz tardó apenas cuatro minutos en desequilibrar la balanza batiendo a Gazzaniga con un cabezazo inapelable. No estuvo fina la defensa del Girona, que le permitió rematar totalmente solo tras un gran centro de Pedraza, que también había ingresado al campo minutos antes.
El 0-1 supuso un gran mazazo para el Girona, que pudo haber rascado un punto en el añadido. Fue Yangel Herrera quien lo intentó con un potente testarazo que no encontró portería, en la última ocasión del partido. El conjunto catalán se queda a seis puntos de la zona de descenso, mientras que el Villarreal se consolida en la quinta plaza, que da acceso a la Champions.