El hombre de 32 años de edad detenido por la Policía Nacional por, presuntamente, agredir sexualmente a una niña de 12 en Molina de Segura se encuentra en libertad con cargos, investigado como supuesto autor de un delito sexual, indican fuentes cercanas al caso.
Del Juzgado de Guardia, el sospechoso salió por su pie, con una orden de alejamiento de su víctima y la condición de presentarse en sede judicial cada 15 días, apuntan las mismas fuentes.
La prisión provisional es la medida cautelar más restrictiva. En este caso, la Fiscalía no consideró (ni el juzgado, por tanto, estableció) que el sujeto tenga que estar entre rejas mientras se lleva a cabo una investigación que está abierta, dado que no se descarta que haya más víctimas de este mismo individuo. Se estima que el vecino, si permanece en la calle, no tiene la facultad de destruir pruebas relevantes para las pesquisas en marcha. De ahí que haya quedado libre. Con cargos, hasta que se celebre su juicio, algo que puede extenderse en el tiempo, incluso años.
Cabe reseñar que, si el adulto incumple la prohibición de acercarse a la pequeña, incurriría en un delito de incumplimiento de condena y la autoridad judicial sí podría ordenar entonces su ingreso en prisión.
El arresto se produjo este Primero de Mayo, en el citado municipio de la Vega Media, aunque los investigadores llevarían detrás de este hombre semanas, apuntan fuentes cercanas al caso. El sujeto pasó al día siguiente, viernes, a disposición judicial en Molina de Segura. Y ese mismo día pudo volver a su domicilio, con cargos y la prohibición de aproximarse a su víctima.
El hombre, supuestamente, habría embaucado a la menor y, tras estar hablando con ella por mensajes durante un tiempo, la habría engatusado para quedar en persona, con la intención de agredirla sexualmente. Esto habría pasado al menos dos veces, en la última de las cuales el adulto, supuestamente, habría consumado una agresión sexual con penetración.