La crisis inmobiliaria y la pandemia de covid ha llevado a muchos trabajadores a reinventarse y cambiar de profesión, en muchas ocasiones invirtiendo en negocios en el medio rural y apostando por estilos de vida más relajado donde priman las relaciones interpersonales y el contacto con la naturaleza lejos del bullicio y el estrés de las grandes ciudades.
Aragón y sus pueblos ofrecen interesantes oportunidades para este nuevo perfil de inversores que buscan reorientar su carrera y dar un nuevo rumbo a su vida, con diversos sectores en los que abrir nuevos negocios. El turismo rural es un fenómeno en auge en la comunidad, que cuenta con una gran riqueza natural y patrimonial que la convierten en un lugar ideal para montar un hotel o una casa rural.
Una de las zonas más atractivas es la Comarca Gúdar-Javalambre, en la provincia de Teruel, que entre sus numerosos atractivos y recursos turísticos cuenta con dos estaciones de esquí: Javalambre y Valdelinares, del grupo Aramon, y centros termales donde disfrutar de una amplia oferta de salud y bienestar. Uno de los pueblos más bonitos de esta comarca es sin duda Camarena de la Sierra, una localidad de 142 habitantes situada a 1.200 metros de altitud y rodeada de sierras y escarpes, también conocida como el «pueblo de las cien fuentes».
Un hotel con restaurante en plena naturaleza
Esta localidad es un destino de referencia para el turismo de interior en la provincia turolense y una excelente localización para invertir en el sector inmobiliario tanto para uso personal como para alojamiento a terceros. Actualmente hay a la venta un hotel en Camarena de la Sierra de 815 metros cuadrados situado en plena naturaleza, en la Sierra de Javalambre, ideal para poder disfrutar del invierno con las pistas de esquí y en verano de las rutas senderistas por fuentes y cascadas.
Se trata de un edificio de estilo castellano de 11 habitaciones con baño completo, todas ellas exteriores, con posibilidad de ampliar a 10 más en las dos plantas superiores, una diáfana y la última abuhardillada y ya compartimendada. El precio del establecimiento se sitúa en los 800.000 euros.
El hotel dispone de restaurante con terraza, cocina completa, zona de barbacoa y almacén, todo ello en su planta baja, así como de zona de aparcamiento para diez vehículos y terraza de verano en el mismo parking, con entrada diferenciada para el hotel y para el restaurante.
Este hotel de lujo en Camarena de la Sierra ha sigo regentado todos estos años por una familia que indica que no se necesita una gran cantidad de personal para su explotación, lo que aumenta la rentabilidad del negocio. El establecimiento se vende por jubilación dejando un legado de buenas críticas, atención y clientela de años disfrutando de sus instalaciones.