«No me la creía. Decían que yo también estaba en esa comida, cosa que no es verdad, yo estaba en Canarias. No me lo creía».
Así revivió Juan Roig este jueves ante los periodistas el momento en el que recibió la noticia de que Miguel Burdeos, el creador de la empresa química SPB, había fallecido en la dana cuando regresaba de una comida con otros tres empresarios.
Roig se pronunció en estos términos ante un pequeño grupo de periodistas tras el acto de homenaje al empresario realizado en la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV), al que acudió el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi.
«Era amigo mío desde los nueve años. Estudiamos juntos en Jesuitas», rememoró Roig. «Para mí ha sido una persona entrañable», agregó.
Juan Roig subrayó el papel activo de Burdeos durante el crecimiento de Mercadona, entonces con su conocido modelo de interproveedores. SPB es fabricante de buena parte de los productos de Bosque Verde que vende la cadena de supermercados.
«En los momentos decisivos yo le he ayudado a él, pero él me ha ayudado mucho a mí. He perdido a un gran amigo y a un gran proveedor», lamentó Roig.
«Creía que iba a aparecer»
El presidente de Mercadona ensalzó que Burdeos «ha conseguido que una empresa local se convierta en una empresa nacional». «Tenía una gran fuerza y fue muy competitivo con otras multinacionales», dijo.
Roig insistió en que, inicialmente, no creyó en la noticia. «Yo creía que iba a aparecer. Como él a veces se subía a la nube a pensar. Yo pensaba: este aparecerá mañana o pasado, estará en un hotel perdido».
Juan Roig ha aclarado que él no participaba en los encuentros como el que tuvo lugar antes de la desgracia. «Yo no iba a comer con él allí. Era muy amigo. Pero yo al golf no le pegaba. Ellos iban a jugar al golf», dijo.