‘First Dates’ suele dejarnos momentos de lo más peculiares y extraños, al menos en ciertas ocasiones. Aunque el objetivo del programa es que los participantes encuentren el amor, no siempre se cumple.
El programa está presentado por Carlos Sobera. Se estrenó en 2016, y tanto ha sido su éxito que ha sido proclamado como un programa de referencia de Cuatro. Los espectadores pueden disfrutarlo de lunes a viernes a las 21:05 horas.
En el programa de hoy los protagonistas han sido una modelo y azafata malagueña en busca del amor de un hombre «que le hiciera reír», Bibiche, de 26 años, y un peluquero y camarero de Jerez de la Frontera muy seguro de sí mismo, Ángel, de 29 años.
«Cada día me miro al espejo y me digo ‘gracias’. La belleza esa que tengo me ha abierto muchas puertas«, comentaba la chica respecto a como de orgullosa se siente de ella misma. Respecto a lo que buscaba en el programa, Bibiche ha comentado que quería un hombre alegre y trabajador porque ella «no mantendría a nadie».
Por el otro lado, Ángel es un chico presumido que llegaba con la intención de encontrar el amor en Bibiche. Sin embargo, las primeras valoraciones de ella no eran buenas, pues no le convencía físicamente: «No me ha dado el impacto ese de querer arrancarle la ropa porque yo soy una chica muy fogosa y tigresa», explicaba.
Para pasar los nervios ha pedido un ‘ron-cola‘ nada más entrar al restaurante, algo que no ha gustado nada a la malagueña porque no bebe alcohol, cosa que ha revelado cuando Ángel encaraba su segundo ‘cubata’: «Yo alcohólicos no«, le decía.
Otra cosa que no le ha convencido del chico es su trato hacia las camareras: «Te falta limoncito, díselo a Matías«, le espetaba a una de ellas. Ante esta falta de educación, Bibiche revelaba que de hablarle un cliente así, «le contestaría de muy malas formas«, porque lo «primero de todo es la educación» y «no hablar a las personas con esa chulería«.
Como se venía viendo, la cita no ha terminado bien y no habrá una segunda oportunidad para conocerse mejor. Para terminar, además, se han puesto a discutir sobre quien era más agraciado de los dos.