Tras 105 días de convivencia, ‘Gran Hermano’ cerró las puertas de la casa y proclamó a su flamante ganador entre sus tres finalistas: Juan, Óscar y Ruvens. El programa cierra la edición como la emisión de prime time más competitivo de la temporada, al promediar con sus galas principales un 16,1% de share y 973.000 espectadores.
La actual edición de ‘GH’, con un 16,1% de share y 973.000 espectadores de media en sus galas principales de los jueves, se ha alzado como el programa de prime time con mejor share de la temporada y ha situado en tercer y séptimo lugar de este ranking a ‘GH’.
Más de una hora después del inicio de la gala, Jorge Javier Vázquez proclamaba al tercer finalista de la edición en un ritual que se producía en la sala polivalente de la casa, habitualmente utilizada para las pruebas semanales. Ruvens quedaba fuera de la ecuación y todo quedaba entre Juan y Óscar.
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El programa dio un giro a su mecánica habitual y trasladó a los dos últimos finalistas al plató de Mediaset para proclamar el ganador pasadas las dos de la madrugada. Todo apuntaba, según las salvaciones y las expulsiones anteriores, a que Óscar podría hacerse con la victoria.
Finalmente, los seguidores de Juan, apoyados por la audiencia indignada con la expulsión de concursantes favoritas como Maica o Daniela, lograron que fuera el bailarín el que se hiciera con el premio, en su caso de 150.000 euros, con un 53,2% de los votos. El equipo de las ‘fresis’ logró la mayor venganza después de que todas las concursantes fueran desterradas y cuando el equipo de Ruvens se creía con el control de la edición.