Laura de Castellet pasó por Mallorca y forma parte de ese grupo de personas que se ha dedicado durante años a recuperar el Canto de la Sibil·la. Aquí tenemos al doctor en Musicología, por la UAB, Francesc Vicens. Ambos son referentes en músicas tradicionales y se complementan en su investigación. Laura es además de doctora en Història medieval la misma Sibil·la de la Seu d’Urgell y allí la interpreta cada año desde 2011. Miembro de diversas corales, estuvo en el coro que acompaña la Sibil·la con Maria del Mar Bonet y en varios conjuntos medievales. Su tesis El paisatge sonor de la Catalunya Medieval (siglos VI-XIV); un exercici de restitució emocional des de l’arqueologia del so (UB, 2022). Después de diferentes actividades en la isla ha presentado esta semana su novedad: Sibil·la. Naixement, metamorfosi i supervivència d’una profecia cantada, que constituye una obra de investigación desde la parte pirenaica y en la colección Toc de Gralla de la editorial Rafael Dalmau.
La fuerza de los mensajes de las antiguas profetas, muy populares en el mundo de la romanidad tardía, fue asimilada por el primer cristianismo para justificar el advenimiento de Jesús y convencer a los nuevos creyentes. El oráculo de la Sibil·la eritrea pasó de sermones públicos para paganos y herejes al diseño de la liturgia en tiempos carolingios. Parece que ese nuevo ritual religioso y de orden político en el proyecto de Carlomagno fue especialmente potente en los obispados catalanes anexionados a Narbona.
Este canto emergería de las profundidades de los tiempos para acabar protagonizando la misa del Gallo en la Noche de Navidad. (En la parte catalana se suele desde hace milenios cortar el cuello a ese animal en un rito ancestral que al día siguiente se sirve como gran plato). Los cambios en el diseño de la ceremonia en el SXVI no han evitado su supervivencia. El contenido de ese canto, al margen de su belleza, todavía cautiva al público en momentos históricos muy difíciles, cambios y peligrosos retos que no paran de abrirse en el nublado horizonte. El sentido de este fenómeno trasciende todos los esquemas. En la misa más importante del mundo católico, y en su centro, ese vértice se vertebra en un paganismo milenario. Hoy que la religión no tiene el mismo impacto, esa noche se llenan los templos a la espera de volver a oír ese oráculo femenino y mediterráneo.
Anuncian, sus diferentes versiones, predicciones apocalípticas, algunas van saliendo en los noticiarios, aunque en un principio deben seguir cantando la llegada del fin del mundo que a través de Cristo nos quiere preparados en el Juicio Final. Ese augurio ya hace rato que se va anunciando pues Laura de Castellet pone el origen en la Sibil·la eritrea, oráculo pagano, esa persona transmite las visiones que ha tenido. Cuando esas visiones son en el ámbito religioso son profecías. Se sospecha que en el Neolítico pudo haber algo muy parecido en el Próximo Oriente y en gran parte del Mediterráneo, chicas que en la adolescencia se preparaban para esta función manteniéndose vírgenes. En cuevas, en la montaña o consagradas a Apolo y Artemisa iban sirviendo variaciones según la geografía y todo en un lenguaje absolutamente poético. Este fabuloso libro contiene las diferentes versiones situando los inicios en Lyon en el siglo IX de nuestra era. Un auténtico estudio cronológico desde los inicios que se conocen hasta el estado de la cuestión en la actualidad recorriendo toda su evolución. La expansión cristiana de los versos sibilinos nos devuelve hoy esta fabulosa aproximación a lo misterioso y a lo desconocido que sigue, en no pocos aspectos, dando cuerda al mundo. No se lo pierdan.