El Tribunal Supremo ha admitido la demanda para la tutela del derecho al honor interpuesta por el juez recientemente jubilado Manuel García Castellón contra la diputada y líder de Podemos, Ione Belarra, por los insultos que le dedicó a través de la red X, en concreto, dijo de él que era un «corrupto» y un «prevaricador».
La Sala Civil del alto tribunal ha admitido la demanda, que la ley marca que tenga tramitación preferente, del que hasta el pasado mes de septiembre era titular del Juzgado Central de Instrucción número 6 y emplaza a la propia Belarra y a la fiscalía a que en un plazo de 20 días presenten las alegaciones que consideren necesarias para darle respuesta.