Las dificultosas tareas de rescate del cadáver localizado en la tarde de ayer martes en del entorno del río Lucena prosiguen desde primera hora de este miércoles, facilitadas por la recuperación de la luz natural. Integrantes de las secciones Científica y de Homicidios de la Policía Nacional intervienen en el propio terreno procurando acumular indicios y tomando fotografías de la zona.
Las ostensibles pendientes y altura, explican fuentes municipales, en un perímetro de singular complejidad, provocan grandes inconvenientes a los agentes, así como la profusa presencia de maleza y árboles, elementos vegetales que, incluso, deberán ser cortados para facilitar el acceso al lugar en el que se encuentra el cuerpo.
Un policía nacional custodia la zona acordonada junto al río Lucena. / M. González
A media tarde de ayer, un hombre, vecino de una casa rural cercana que se dedicaba a recolectar setas, observó un cuerpo sin vida y en un avanzado estado de descomposición, transmitiendo el correspondiente aviso a las fuerzas policiales. Distintas fuentes indican que este vecino pudo ver el cadáver desde la distancia, posiblemente desde una baranda.
Un vecino lo encontró
Este mismo hombre acompaña a los efectivos policiales a fin de transmitirles indicaciones, por su conocimiento del paraje, y facilitar la búsqueda.
Distintas fuentes refuerzan la teoría de que este cuerpo corresponde a Pedro Mayorgas, el hombre de 84 años desaparecido desde el 29 de febrero en Lucena. La Policía Nacional comunicó ayer mismo el hallazgo a la familia, según fuentes próximas a los allegados de Mayorgas, incidiendo en la probabilidad de que fuese este varón. En este mismo perímetro, en repetidas ocasiones aunque sin resultados exitosos, se han realizado batidas e indagaciones.
El cauce del río en cuyas inmediaciones ha aparecido el cadáver se localiza entre la calle de la Industria, dentro del polígono de La Viñuela, y la Cooperativa Olivarera de Lucena, delimitaciones que han sido acordonadas con precinto policial.