El Atlético de Madrid regresó este lunes por la tarde a los entrenamientos después del fin de semana libre concedido por el cuerpo técnico a la plantilla aprovechando el parón liguero provocado por los compromisos de las selecciones nacionales.
Lo hizo con diez efectivos del primer equipo: Galán, Giuliano, Witsel, Lenglet, Lino, Koke, Barrios, Lemar, Griezmann y Correa. Fueron baja los mismos jugadores de la semana anterior, Azpilicueta, Le Normand y Marcos Llorente. Y tres futbolistas regresaron a Madrid tras estar con sus países (Oblak, Gallagher y Sorloth), aunque como es habitual, tuvieron día libre y este martes ya estarán trabajando con normalidad con el grupo.
Diego Simeone dedicó buena parte del entrenamiento a ensayar las jugadas ofensivas, sacando el balón desde la defensa, para luego finalizar. Un aspecto que el Atlético de Madrid está echando en falta en este inicio de temporada, evidenciando problemas para generar ocasiones de gol, sobre todo en los dos últimos partidos (Da Luz y Reale Arena) donde el equipo colchonero sólo remató una vez entre los tres palos en los casi 200 minutos de juego.
El Cholo y Tevenet se afanaron por explicar los conceptos a los futbolistas, con Griezmann, Barrios y Koke y Lemar como ‘generadores’ y Lino y Giuliano llegando por las bandas. Sorprendió ver al canterano en el carril derecho, pero sin Llorente, Molina ni Riquelme (convocado por España) el técnico argentino experimentó con Giuliano en esa demarcación. Rayane Belaid también estuvo con el primer equipo.
El Atlético formó en este entrenamiento con: Giuliano, Witsel, Lenglet, Galán (central por la izquierda), Lino; Koke, Barrios, Lemar, Griezmann; y Correa. Obviamente, con esta disposición, Simeone sigue con ese 5-3-2 que se convierte en un 5-4-1 en defensa y un 4-3-3 en ataque ya que un carrilero siempre actúa como extremo en este sistema.
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