Tras la emocionante final del sábado 12 de octubre, el domingo se celebró la entrega de premios de la primera edición de la Puig Women’s America’s Cup. Esta Copa del América femenina —como su contraparte masculina— ha tenido lugar en la Ciudad Condal, donde el equipo ganador ha recibido también en la tarde del 13 su merecido trofeo.
Las regatistas italianas del Luna Rossa Prada Pirelli recogieron su copa tras derrotar a las favoritas de las encuestas: las británicas del Athena Pathway-INEOS. Tan solo ocho segundos impidieron que el trofeo diseñado por la arquitecta española Patricia Urquiola acabase en Reino Unido.
Las británicas recogieron su trofeo al segundo puesto entre sonrisas y vítores. «Se ha hecho historia, pero esto tiene que convertirse en la norma», dijo Hanna Diamond, mientras su equipo subía al podio. Para la regatista, este campeonato solo es el principio para que «todas estemos en el punto de mira en la navegación».
Por su parte, el equipo español del Sail Team BCN se llevó el tercer puesto tras quedar a solo tres puntos de alcanzar la final. Las regatistas nacionales, Silvia Mas, Neus Ballester, María Cantero y Paula Barceló —y Nicole Van der Velden como reserva—, con una media de edad de poco más de 26 años, han demostrado un brillante futuro en esta competición de vela femenina para nuestro país.
Durante la entrega de trofeos, las campeonas absolutas subieron al escenario con sonrisas que eclipsaban los aplausos desenfrenados del público. La tripulación del Luna Rossa Prada Pirelli, según los propios responsables del Louis Vuitton 37ª America’s Cup Match, realizaron toda «una demostración de calma y serenidad», y su esfuerzo se vio recompensado con un «trofeo histórico».
Capitaneadas por la veterana olímpica Giulia Conti, que también es doble campeona mundial, la joven cuatro veces campeona mundial Margherita Porro (25 años), María Guibilei y Giulia Fava demostraron una coordinación que los expertos califican de «impecable» en sus maniobras.
La entrega de la copa ha recordado a las palabras de una de las tripulantes italiana, Giubilei, tras la victoria: «No sé cómo describir lo que siento. Estoy superfeliz y orgullosa del equipo, es una sensación solo maravillosa. No estoy segura de que podamos entenderlo todavía. Tal vez en los próximos días comprendamos que lo que hemos hecho es algo realmente grande y lo importante que es para las niñas de todo el mundo. Espero que esto inspire a la gente a seguir sus sueños y vivir la vida que quieren».
Esta Puig Women’s America’s Cup, la primera competición de vela de estas características en la que compiten exclusivamente mujeres, ha sido un campeonato de primeras veces. Como explicó Giubilei tras la victoria de su equipo, esta primera edición femenina de la famosa regata podría ser el primer paso para que las mujeres naveguen a bordo de los AC75 en futuras ediciones de la Copa del América.
«Creo que sería bueno, sobre todo porque algún día quiero subirme al Luna Rossa», ha asegurado la regatista. Y ha añadido: «Sería genial para las mujeres que en algún momento no hubiera una regata solo para nosotras, sino que estuviéramos mezcladas con el resto de los regatistas».
