La asociación Libertad VCF, opuesta a la gestión del empresario singapurense Peter Lim al frente del Valencia, denunció este lunes la retención desde el pasado viernes de dos aficionados del club de Mestalla en Singapur y la vinculan a una protesta a las puertas de la casa del inversor y reclamó su «liberación inmediata» además de la intervención de «las autoridades políticas y diplomáticas».
Pedro Morata contó este lunes esta historia de una pareja que había aprovechando su viaje de bodas para visitar Singapur. Uno de los dos aficionados colgó la semana pasada en sus cuentas en redes sociales una foto suya con una pancarta con el lema ‘Lim go home’ y una pegatina con el mismo mensaje pegada frente a un edificio que identificaba como una propiedad del empresario.
Al día siguiente, la pareja se va al aeropuerto para viajar a Bali y cuando pasan el control de seguridad, dos personas trajeadas le llaman, apartan al chico y le hacen preguntas al aficionado. De ahí pasan a la policía, que les interrogan y a él le quitan el pasaporte. Ahora, los dos están encerrados en un hotel a la espera de qué pasa con ellos este martes, en la cita con la policía, a la que acudirán con el embajador español.
La policía les dirá qué delito han cometido poniendo la pegatina y la pareja, según cuenta Pedro Morata, se encuentra muerta de miedo allí porque no saben qué va a pasar con ellos: si les van a detener, si les van a retener allí, si les van a quitar los pasaportes…
el apoyo de la afición valencianista
En un comunicado Libertad VCF se solidarizó con los retenidos y aseguró que lo están «por ejercer pacíficamente su derecho a la libertad de expresión» y exigió «la intervención inmediata de las autoridades políticas y diplomáticas de España para proteger los derechos, libertades, integridad y dignidad» de las personas retenidas.
Libertad VCF hizo un llamamiento «a todo el valencianismo» a manifestar «su repudio a quienes no respetan los principios fundamentales de convivencia.
La asociación califica de «abuso» la situación y asegura que «está orquestado por Peter Lim«, una actuación que aseguran que hace que sus «relaciones» con las instituciones valencianas sean «absolutamente incompatibles» con la sociedad valenciana.
