Cinco indígenas embera, entre ellas tres menores, fueron secuestradas en el departamento colombiano del Chocó por el Clan del Golfo, que irrumpió en su comunidad y las hicieron bailar para ellos, denunciaron este jueves organizaciones de mujeres y feministas.
La situación ocurrió en la comunidad Punto Viejo en la que miembros de este grupo, la principal banda criminal del país, «obligaron a las mujeres de la comunidad indígena embera a bailar para ellos», según la denuncia. «Ante este y otros hechos de intimidación, las mujeres se vieron forzadas a huir en horas de la noche, pero 5 de ellas fueron retenidas», asegura el documento publicado en redes sociales por organizaciones de mujeres.
Según el comunicado compartido por las denunciantes, los detalles del paradero de las cinco mujeres y su situación actual son desconocidos, lo que aumenta el temor por sus vidas. Estas mujeres fueron identificadas como Merina Forastero Isarama, de 14; Yamilda Forastero Isarama, de 18; Enerita Forastero, de 14; Yorleydi Chamorro Morroco, de 15 y Clara Chamorro Morroco, de 19 años.
Las organizaciones señalaron que estos hechos no son aislados y remarcaron que «la violencia sistemática en Chocó» se ha intensificado a lo largo del tiempo, con un total de 108 homicidios en lo que va de 2024, todos atribuidos a bandas criminales organizadas y al Clan del Golfo.
Ante la situación, las denunciantes dijeron que es «imperante reactivar los acuerdos humanitarios, ceses al fuego y mesas de conversaciones entre los distintos actores armados y el Gobierno Nacional». Añadió que es «apremiante» que el Gobierno Nacional dentro de la declaratoria por violencia basada en género establecida en el Plan de Desarrollo, declare a Chocó prioridad para garantizar el derecho a una vida libre de violencias de las mujeres y las niñas en toda su diversidad. «Es urgente la adopción de las medidas para prevenir, judicializar y sancionar los hechos de violencia basada en género y por prejuicio como condición necesaria para proteger su vida y la seguridad en todo el departamento», concluye el comunicado.
La Fiscalía colombiana levantó, a finales de agosto pasado, las órdenes de captura contra tres jefes del Clan del Golfo, que participarán en un «espacio de conversación sociojurídico» con el Gobierno, que busca «el fin de esa organización». De acuerdo con la resolución de la Fiscalía, a los que se les levanta la orden de captura son Orozman Orlando Osten Blanco, alias ‘Rodrigo Flechas’; Elkin Casarrubia, llamado ‘el Cura’, y a Luis Armando Pérez Castañeda, conocido como ‘Bruno’.
Al contrario de las otras tres mesas de negociaciones instaladas -con el ELN, con las disidencias de las FARC del Estado Mayor Central (EMC) y la Segunda Marquetalia- se trata de un espacio de conversaciones sociojurídicas, ya que el Gobierno no les reconoce a un estatus político.