Una vez que el Tribunal Constitucional rechazó admitir a trámite el recurso con el que algunas víctimas de los atentados del 17-A trataban de que se revisara la sentencia de la Audiencia Nacional, la Guardia Civil ha solicitado permiso para proceder a la destrucción de pruebas que acumula desde agosto de 2017. La defensa de los padres del pequeño Xavi, fallecido en el atropello de la Rambla, se opone, porque quiere esperar a que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) se pronuncie sobre la demanda que tiene previsto presentar esta misma semana sobre el derecho a la verdad que considera que España les ha negado.

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