Desde ayer podemos rendir ya cuentas con el fisco. Aunque es plato de gusto de pocos, los contribuyentes son raudos en cumplir con la cita. Tan solo en el primer día de la Campaña de la Renta, se presentaron más de 1.165.000 declaraciones, un 4,3% más que el año anterior.
En esta campaña, la más larga de la historia ya que se extenderá hasta el 1 de julio, el 50% de los ingresos por IRPF «los pagará la clase media», según ha explicado en Herrera en COPE, la experta en Economía, Pilar García de la Granja. Y para muestra expone un botón. «Ocho millones de personas que ingresan entre 21.000 y 60.000 euros brutos al año, pagan en torno a 50.000 millones de euros». Son los grandes «paganinis», según los últimos datos oficiales del 2021.
Presión fiscal
No obstante este año la renta llega con novedades y no está de más recordar las diferentes desgravaciones que nos pueden beneficiar y tratar que nuestra declaración nos salga lo más favorable posible porque tal y como ha explicado el economistaMarc Vidal en ‘Herrera en COPE’, la presión fiscal en España ha subido un 20% en los últimos 30 años.
Recuerda el analista que «si realmente hubiera 21 millones de cotizantes, con una capacidad adquisitiva formal, el esfuerzo fiscal no sería el más alto de Europa». En los últimos cinco años, «España encabeza el incremento de impuestos y permanece en la cola en cuanto a crecimiento económico, productividad o control de la deuda».
«Desde que llegó Sánchez a la Moncloa han subido los impuestos hasta en 69 veces. España es el país con mayor subida de impuestos entre el 2019 y el 2022 de todos los socios europeos», añade Pilar García de la Granja.
«Pagaremos más»
En las principales novedades para este año, que no hay deflactación del IPC en el IRPF, «es decir que pagaremos más», explica De la Granja o que el tipo efectivo medio de IRPF «es el más alto de la historia: un 14,3%».
Además, «prácticamente no te puedes desgravar nada por ahorrar en los planes de pensiones, donde el límite son 1500 euros -cuando llegó Sanchez al poder eran 8.000-, pero sí te puedes desgravar en algunas CCAA por ir al gimnasio, por un aprendizaje extraescolar de otro idioma en Baleares, o por la compra de bicicletas en la Rioja».
¿Desgravarme la bici?
Has leído bien, por la compra de una bicicleta en esta región siempre que no tengan eso sí, asistencia eléctrica.
La cuantía y límite de la deducción, según publica la Agencia Tributaria, es del 15% del importe con un límite máximo de 50 euros por vehículo y con un máximo de dos bicicletas por familia.
Basta para ello con presentar la correspondiente factura de compra .
¿Y quién se la desgrava? La persona «a cuyo nombre se emita la factura», salvo cuando haya más de un titular en cuyo caso se prorrateará a partes iguales entre ambos.
Lo mismo se hará en el caso de los matrimonios en régimen de gananciales que presenten declaraciones individuales.
Ropa o fisio deportiva
La Comunidad Valenciana también se ha sumado al carro de las deducciones ‘deportivas’ en los tramos autonómicos del IRPF, el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas. En este caso por los gastos relacionados con laactividad física, ya sea para ropa, unas zapatillas o un fisioterapeuta.
Se trata de un 30% con el límite de 150 euros de importe de la deducción. Pero hay excepciones.
¿Por qué ayudas al deporte?
A estas alturas nadie duda del papel crucial que juega deporte en nuestra salud física, mental y emocional. Es una herramienta poderosa para mejorar la calidad de vida y prevenir enfermedades.
Es por ello que organismos como la Organización Mundial de la Salud (OMS) hayan apelado a los países a adoptar políticas en aras de luchar contra la inactividad física y reconocer el deporte «como bien de primera necesidad».
Según explica el mismo BOE, esta necesidad presume de la «implementación por parte de los poderes públicos de políticas transversales y multisectoriales destinadas a incentivar su práctica».
Es más, desde un punto de vista solo económico, al incidir en la salud en general, el deporte «tiene un impacto positivo en términos de ahorro de gasto sanitario».
