El dato de matriculaciones del mes de marzo confirma las buenas perspectivas que las empresas de alquiler de vehículos tienen para este ejercicio. Las conocidas como rent a car dispararon casi un 66% sus compras de automóviles nuevos para reforzar sus flotas en la provincia de cara a la temporada alta y salvaron a los concesionarios alicantinos de la caída general de ventas que se registró en el conjunto del país por el efecto Semana Santa, es decir, por el hecho de que este año marzo tuviera menos días laborables.
De esta forma, en total durante el pasado mes se matricularon en la provincia 7.512 turismos y todoterrenos, según los datos aportados por las patronales Faconauto, Ganvam y Anfac. Una cifra que supone un incremento del 24,66% sobre el mismo mes del año pasado y que contrasta con el retroceso del 4,7% contabilizado a nivel nacional.
Eso sí, la evolución fue muy distinta en función del segmento del mercado que se analice. Así, la cifra de vehículos adquiridos por compradores particulares se redujo ligeramente, un 2%, hasta las 1.605, fruto del impacto que ha tenido la subida de tipos en las economías domésticas y del menor número de días hábiles de este mes.
Más preocupante es la fuerte caída de las matriculaciones de las empresas, que descienden un 47,4%, al pasar de 1.212 a 637. Un dato que puede ser un indicador de que la actividad económica se está desacelerando y las compañías están optando por recortar gastos que no consideran imprescindibles.
Sin embargo, el fuerte tirón de las compras protagonizadas por las firmas de alquiler turístico de automóviles logra compensar ambos descensos. Así, sólo durante marzo se matricularon hasta 5.270 vehículos en la provincia con este fin, un 65% más que en el mismo mes del año anterior y alrededor de un 70% de las ventas totales del mes.
Crisis de los chips
Cabe recordar que desde la pandemia las populares rent a car han tenido problemas para renovar sus coches, debido a la paralización que sufrieron muchas factorías por falta de chips electrónicos, lo que provocó que los fabricantes reservaran los vehículos que tenían disponibles para los canales que les resultan más rentables. Con la normalización, las empresas de alquiler vuelven a tener el grifo abierto, lo que ha provocado este importante repunte, impulsado también por las buenas perspectivas del sector este año, en que prevé un récord de facturación por la mayor afluencia de turistas internacionales.
En cuanto al acumulado del año, en los tres primeros meses del ejercicio se han matriculado en Alicante 13.365 turismos y todoterrenos, un 19,22% más que en 2023.