El oro, uno de los activos considerados refugio en tiempos de incertidumbre, ha alcanzado este miércoles un nuevo máximo histórico, por encima de los 2.290 dólares por onza, ante la perspectiva de que los tipos de interés empiecen a bajar a partir del verano y en un contexto de tensiones geopolíticas en Oriente Medio y de incertidumbre política por las elecciones estadounidenses.