Por mucho que los puestos de promoción sigan resistiéndose pese al cambio de tendencia que han experimentado los de Felipe Miñambres, el Levante no quiere perder la esperanza ni sentir que la élite del fútbol español está lejos de su alcance. Nueve jornadas restan de competición y el equipo levantinista, por mucho que no lo parezca, tiene el sueño de volver a competir en Primera División tan a su alcance como en su mano.
El Ciutat de València, que ha recuperado su aura y su espíritu de fortaleza después de un tramo competitivo donde los rivales salían vivos del territorio levantinista, quiere volver a experimentar tardes mágicas que impulsen al combinado granota hacia el ascenso. Aún quedan encuentros por disputar en casa, pero, sin duda, los dos próximos, que serán de manera consecutiva, son el contexto idóneo para dar el salto a una de las seis primeras plaza de la tabla. El club es consciente de su importancia y, por ello, ha dado un paso al frente. El sueño de subir al lugar que le corresponde al Levante no se puede escapar.
El coliseo del barrio de Orriols se prepara para vivir dos días mágicos junto a su gente a través de una promoción de entradas dirigido a sus abonados. Los socios podrán comprar un paquete con una entrada para el encuentro contra el Zaragoza y otra para el partido frente al Amorebieta por el precio de diez euros. Cada afiliado tendrá la posibilidad de adquirir un máximo de tres lotes, mientras que el coste aumentará en función de la cantidad, pero siendo equivalente al valor correspondiente: 20 un total de dos y 30 en el caso de comprar tres. Una iniciativa que ha sido bien recibida dentro del levantinismo, preparado para llenar las gradas del Ciutat de València con granotas que no pierden la ilusión de volver a ver a su equipo junto a los mejores del panorama nacional.
Hoy, a partir de las 09:00, los abonados podrán ser parte activa de la promoción del club mediante su página web. En el caso de que Orriols no cuelgue el cartel de ‘no hay billetes’, la vente dirigida al público general se abrirá a partir del viernes. No obstante, el Ciutat de València, cuyo ambiente es tan mágico como hostil para los adversarios, quiere subir sus decibelios y potenciar su mística en un tramo trascendental de la temporada. Los de Felipe Miñambres, desde su derrota en Oviedo, registran dos victorias y tres empates que han devuelto la ilusión a los granotas, pero no ha sido suficiente para volver a militar en el playoff. Motivo por el que todas las partes involucradas quieren sumar efectivos para la causa.