A Kylian Mbappé sigue sin hacerle ninguna gracia ser sustituido. Da igual el partido, el rival y el escenario. El crack francés quiere jugar siempre y lo volvió a demostrar en el ‘Classique’ ante el Olympique de Marsella. El de Bondy fue titular junto a Kolo Muani y Dembélé en la punta del ataque, pero Luis Enrique decidió que más allá del minuto 60 iba siendo hora de reservarlo.
Pues a Mbappé no le hizo ninguna gracia. En cuanto se anunció que tenía que ser sustituido por Gonçalo Ramos, el francés respondió con un gesto de enfado tremendo, como de no entender la situación. Otra vez Luis Enrique le sacaba del terreno de juego, con un partido que aún estaba más que abierto con el 0-1 a favor del conjunto parisino.
Mbappé, lejos de quedarse junto al resto de sus compañeros, decidió que, si iba a ser sustituido, no se iba a quedar junto al técnico asturiano en el banquillo. Así, en cuanto salió del terreno de juego se fue directamente a vestuarios. En las imágenes del túnel de vestuarios se ve al crack visiblemente enfadado.
No es más que el último episodio de polémicas que rodean a Luis Enrique y Mbappé. El técnico asturiano siempre se ha empeñado en escurrir el bulto, pero el galo parece empeñado en echar leña al fuego.
Veremos qué sucede en esa relación teniendo en cuenta que la eliminatoria contra el Barça está a la vuelta de la esquina. Para Luis Enrique y pese a los últimos cambios durante los partidos, Mbappé es un jugador capital.