El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado que «en las próximas semanas» el Gobierno prevé «revisar, reforzar y agilizar» el programa de ayudas públicas para la adquisición de vehículos electrificados y la instalación de puntos de recarga de las baterías, en diálogo con el sector.
Así lo ha anunciado el presidente del Gobierno en la sesión de clausura del Foro Anfac 2024 organizado este martes en Madrid por la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac). Según Sánchez, el programa de ayudas ‘Moves III’ ya ha asignado cerca de 1.000 millones de euros a las comunidades autónomas para incentivar la adquisición de vehículos eléctricos. Además, el plan ‘Moves flotas’ está sirviendo a 54 programas de renovación de otras tantas flotas, al tiempo que en 2023 se han superado los 30.000 puntos de recarga, con un crecimiento del 40% respecto al año anterior.
«No estamos satisfechos, queda mucho por recorrido», ha reconocido Sánchez, dirigiéndose hacia el presidente de Anfac y consejero delegado de Seat y Cupra, Wayne Griffihts.
Perte VEC
Durante su intervención, el presidente del Gobierno ha explicado que el Gobierno ya ha movilizado el total de fondos europeos previstos dentro del Proyecto estratégico para la recuperación y transformación económica del vehículo eléctrico y conectado (Perte VEC). «A día de hoy hemos movilizado el total de los fondos previstos. Más de 2.280 millones de euros concedidos para más de 700 proyectos y 550 empresas, ubicadas en todas las comunidades autónomas», ha dicho.
A este capítulo ha sumado la movilización de 6.000 millones para apoyar la producción de baterías (en Extremadura y en la Comunidad Valenciana) y el fomento de la cadena de valor industrial del vehículo eléctrico y conectado (en las plantas de Ford, Renault, Seat y Stellantis, y en proeyectos de País Vasco y Navarra).
Resolución de 10 proyectos del Perte VEC II
El presidente ha anunciado la resolución de los primeros 10 proyectos provisionales relacionados con la línea B, vinculada a la cadena de valor industrial del vehículo eléctrico, de la segunda convocatoria del Perte VEC, con 170 millones de euros de ayudas públicas que permitirán una movilización industrial de 500 millones de euros.
En concreto, la línea B del Perte VEC II, que tiene presupuestados 344 millones de euros en subvenciones y 215 millones en préstamos, busca impulsar planes de inversión para la cadena de valor industrial del vehículo eléctrico y conectado, sus sistemas, subsistemas y componentes, además de ciertos sistemas de infraestructuras auxiliares necesarios para su despliegue.
Las primeras 15 resoluciones de esta línea se esperaban para el pasado 7 de febrero, según anunció el Ministerio de Industria, pero ha sido este martes, de mano del presidente del Gobierno, cuando se han anunciado la primera tanda de resolución, con 10 proyectos.
Después de la resolución de esta segunda convocatoria, «en los próximos meses» se culminará la tercera fase. La cuarta, se resolverá en el último trimestre del año -según el calendario descrito por Sánchez- , con más de 1.250 millones de euros de fondos europeos vinculados con la segunda fase del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
El sector quiere ayudas directas
El plan Moves es insuficiente para el sector, que se queja de que esta fórmula no funciona y pide ayudas directas para incentivar la venta de este tipo de coches. “En España seguimos con unas ventas insuficientes de vehículo electrificado. No recuperamos terreno en países como Alemania, Francia o Portugal. No es un problema de oferta, sino porque las ayudas Moves no funcionan”, ha asegurado el presidente de la patronal, Wayne Griffiths.
Griffiths asegura que no es un “problema de presupuesto” sino “de que el modelo de ayudas es lento y los ciudadanos no saben que existen ayudas”. “En Europa el 22% de los coches son electrificados y en España solo el 12%. Seguimos en el vagón de cola de la electrificación. Nuestra obligación es dar la vuelta a esta situación. El Gobierno tiene que hacer más en las ayudas, pero también para explicar los beneficios del vehículo de cero emisiones”, ha añadido.
España es el segundo fabricante de vehículos de la Unión Europea y el octavo a nivel mundial, tras superar en 2023 a Brasil. Aquí se fabricaron el año pasado 300.000 coches eléctricos, el 20% del total, frente a los 16.000 de 2019, según la patronal Anfac. Pero las ventas de este tipo de coches apenas representan el 5% de las adquisiciones. Por su parte, el consejero delegado del Grupo Renault y presidente de la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA), Luca de Meo, ha afirmado que «la transición al vehículo eléctrico la tiene que pagar la gente que tiene pasta, los ricos. Este tipo de coches son más caros, es la gente que tiene disponibilidad la que se tiene que comprometer».