Avanza la instrucción del caso de la muerte de José Antonio Justel Alonso, el cartero leonés que fue víctima a primeros de noviembre de una salvaje paliza en Fomento que le costó la vida. Esta mañana se produjo la declaración en el Palacio de Justicia de algunos de los testigos de la agresión. Entre ellos, declararon varios de los porteros del pub a cuya puerta se produjo el ataque. Estos explicaron que, normalmente, cuando se produce un incidente interior, como fue el caso, suelen sacar a los implicados por puertas diferentes. Si bien, esta maniobra no se siguió el día de autos, porque «no tenía la llave de la puerta trasera» y que esta se encontraba cerrada.

De esta forma, tanto los dos agresores, Bryan H. M. y Adrián G. G., los dos en prisión provisional, así como José Antonio Justel Alonso, la víctima, salieron los tres por la misma puerta, la principal. Los dos primeros lo hicieron en primer lugar y el tercero a los pocos segundos. Apenas puso un pie en la calle, y cuando se encontraba girado hacia el interior del local, fue que se produjo el primero de los golpes, un puñetazo por la espalda, que impactó en la sien de la víctima y la tumbó en el suelo. Después llegaron el resto de golpes que harían entrar en parada cardiorespiratoria a la víctima. Esta falleció horas después en el HUCA, donde ya ingresó en muerte cerebral.

Los testigos que declararon ayer, según las fuentes consultadas, señalan a Bryan H. M. como el autor de los golpes, entre ellos del primer puñetazo, pero dejaron más dudas respecto a la implicación de Adrián G. G.. Los dos estuvieron, eso sí, fugados durante casi cuatro días. El primero fue detenido en Avilés, en la calle El Castaño, del barrio de Bustiello, cerca de Llaranes. Mientras que el segundo fue arrestados horas después en Gijón, en concreto, cerca de Santa Bárbara.